Análisis: La oportunidad de un futuro mejor y las reglas del juego
La responsable de Energía On, la nueva plataforma de "Río Negro", realizó un balance sobre Vaca Muerta, luego de dirigir las entrevistas de la VI jornada de Energía que organizó nuestro diario.
Si hay un consenso superlativo en torno a Vaca Muerta es que ya no está en discusión la calidad de la roca generadora y la potencialidad que tiene no sólo de llevar al país a ser exportador de gas y petróleo a gran escala, sino también de generar una lluvia de divisas para un Estado que se enfrenta a una aguada crisis financiera y económica.
Pero el gas y el petróleo de Vaca Muerta no brotan de las buenas intenciones y requieren de inversiones cuantiosas, de miles de millones de dólares, para dejar el estado de potencialidad y pasar a ser una realidad.
A ocho años de la perforación del primer pozo hacia el shale oil, la foto actual de Vaca Muerta indica que la formación debe encaminarse hacia a la gran escala que le permita salir al mercado exportador y competir cara a cara con el mejor jugador del segmento, el shale estadounidense.
Vaca Muerta está lista para exportar petróleo
Pero también hay un consenso en la industria hidrocarburífera argentina que no es tan positivo y que casi como un ruego al cielo es repetido por las operadoras. Esta es la necesidad de que haya reglas claras del juego que se mantengan en el tiempo. Algo que no ocurrió ni con las retenciones a las exportaciones, ni con los recortes de la Resolución 46.
El CEO de Tecpetrol, Carlos Ormachea, fue elocuente ayer al respecto al indicar que “necesitamos que al menos no cambien las reglas”. Un pedido que viene de un sector que en medio de una nueva disparada del riesgo país quiere seguir invirtiendo.
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