Anotame otra copa

El trofeo, rodeado de varios pibes y algunos “veteranos”. El Millonario fue un justo ganador.

La primera edición de la Supercopa Euroamericana, aún con carácter extraoficial, inscribió a River como el primer ganador de la historia. Fue gracias al 1-0 sobre Sevilla, en un Monumental que tuvo 45.000 espectadores en las tribunas. El Millonario fue un justo ganador en el balance del partido, pero no le resultó sencillo en el comienzo, porque la primera media hora se encontró con un equipo muy ordenado. A partir de entonces los locales tomaron el comando de las acciones y de la mano de un Leo Pisculichi encendido empezaron a gestar acciones de riesgo frente a Beto Bastos. No cambió en demasía la tesitura del juego en la parte final, aunque el protagonismo de River se atenuó en parte, hasta que sobre los 20 se produjo el ingreso de Rodrigo Mora por Giovanni Simeone (su padre Diego estuvo presente en el estadio). Y fue justamente Mora, quien avisó previamente con un tiro en el palo, el gestor de la victoria a los 37, con un buen desborde por derecha y un posterior centro al corazón del área que Kaprof (reemplazó a Mercado en el descanso) conectó con un “tacazo” y lo transformó en el triunfo del equipo argentino, el primero de esta naciente Euroamericana. Y si de historia se trata, nada mejor que Amadeo Carrizo, arquero de excepción y presidente honorario del club, para ser receptor de una plaqueta con el nombre de James Hogg, el mentor del primer partido de fútbol jugado en suelo argentino. Esto ocurrió el 20 de junio de 1867 en donde se erige el Planetario de Buenos Aires, cuando se enfrentaron dos equipos de ocho integrantes cada uno, identificados con los colores blanco y colorado. Los primeros representaban a Buenos Aires Cricket y los segundos a Buenos Aires Football Club. Precisamente Hogg, junto a su hermano Thomas, formaron parte de los blancos. Desde aquel Día de la Bandera pasaron casi 148 años y el fútbol creció desmesuradamente. Esta Euroamericana no es oficial, por ahora, pero algún día lo será y seguramente este 26 de marzo de 2015 también pasará a la historia como la fecha en que nació el hermano menor de la ya ex Intercontinental que jugaban los campeones de América y Europa. River representó al campeón del segundo torneo interclubes en importancia de América, la Sudamericana, y Sevilla, titular de la Europa League (ex Copa UEFA). Y que mejor entonces que un equipo argentino y otro de su “Madre patria”, España, para arrancar una historia que promete muchos capítulos más.

DyN

euroamericana