Asaltó la farmacia que funciona en la planta baja del edificio donde alquila

Asaltó la farmacia que funciona en la planta baja del edificio donde alquila

El juez de garantías Juan Martín Arroyo admitió los cargos que el fiscal adjunto Gerardo Miranda formuló contra un joven por el delito de robo en una farmacia, agravado porque utilizó un cuchillo. El magistrado impuso además la prisión preventiva para el imputado, cuya identidad no se difundió, durante dos meses tal como había solicitado el fiscal. Arroyo dispuso que la investigación se desarrolle por cuatro meses.

Desde el área de prensa del Ministerio Público Fiscal informaron que el lugar donde el imputado cumplirá los dos meses de prisión preventiva se definirá en función del informe psiquiátrico del joven, que elaborará el Cuerpo Médico Forense.

Miranda atribuyó al acusado haber entrado a la farmacia, que está ubicada en el cruce de las calles Chubut y Rolando, en el barrio El Mallín, portando un cuchillo con el que amenazó a la empleada. De acuerdo a la acusación fiscal, el imputado sujetó a la empleada y le colocó el cuchillo en el cuello para exigir que le diera la recaudación.

El robo ocurrió a las 18.10 del lunes. El fiscal explicó que el sujeto entró varias veces a la farmacia y formuló consultas a la empleada. El muchacho alquila un departamento en la planta alta del edificio. Mientras que en la planta baja funciona la farmacia. Cuando regresó tenía un cuchillo tipo tramontina, con mango de madera.

La empleada intentó escapar, pero no pudo. Luego el hombre se acercó a la caja registradora, sustrajo dinero y se retiró del lugar. Cometió el robo a cara descubierta. La empleada observó que el imputado entraba a un departamento ubicado arriba de la farmacia. Por eso, minutos después personal policial lo detuvo. Aunque no recuperaron el dinero que había robado, según informaron fuentes judiciales.

Miranda describió en la audiencia de formulación de cargos, que se hizo hoy miércoles por la mañana, las pruebas recolectadas para sostener la acusación.

Alegó que existe el riesgo de entorpecimiento de la investigación. Advirtió que el sujeto vive en el mismo edificio en el que trabaja la propia víctima y recordó la actitud desplegada por el imputado al momento de ser identificado y detenido. Por eso, solicitó la prisión preventiva para el acusado, que fue asistido por el defensor oficial Marcelo Álvarez Melinger, junto a la defensora adjunta Mónica Goye, que no plantearon objeciones a la formulación de cargos pero si solicitaron el plazo de 4 meses para investigar el hecho.

Con respecto al pedido de preventiva, los defensores oficiales requirieron al cuerpo médico forense que elabore un informe psiquiátrico del paciente, para definir el lugar de alojamiento y si presenta condiciones para afrontar el proceso.