Bariloche: pugnan por mantener ayuda estatal para el pago de sueldos
Las cámaras empresarias del sector turístico mantienen activas gestiones ante el gobierno nacional para que no elimine la ayuda destinada desde el comienzo de la pandemia a sostener el pago de salarios.
En lo formal, el programa ATP quedó clausurado el 31 de diciembre . Foto: Marcelo Martinez
La reactivación de la actividad turística no logró todavía los niveles esperados y las cámaras empresarias del sector mantienen activas gestiones ante el gobierno nacional para que no elimine la ayuda destinada desde el comienzo de la pandemia a sostener el pago de salarios.
En lo formal, el programa ATP quedó clausurado el 31 de diciembre y el pago de los sueldos de enero, si no cambian las condiciones, deberá ser afrontado en su totalidad por los empleadores.
La presidente de la Cámara de Turismo de Bariloche, Belén García Bertone, dijo que “el planteo está hecho y quedan varios días para obtener una respuesta”, pero admitió que muchos prestadores turísticos no podrán abonar los haberes del mes en curso sin auxilio del Estado.
Explicó que la hotelería sufre los mayores perjuicios porque “es la que genera más empleo” y la que hasta ahora tiene los registros de ocupación más bajos, desde que se rehabilitó el ingreso de turistas, a comienzos de diciembre.
Los bungalows y cabañas, en cambio, concentran por ahora la preferencia de los viajeros y en contraposición, tienen un número de empleados mucho menor.
“Claramente el sector necesita asistencia y lo que tratamos de explicar es que interrumpirla ahora es dejarnos a mitad del río, es tirar por la borda toda la ayuda que se ha venido otorgando, porque hay firmas que no van a poder subsistir”, dijo García Bertone.
Insistió en que el ATP es un subsidio que “en realidad no es para la empresa sino para el trabajador”, porque es el instrumento que “permite mantener el empleo”.
Las gestiones a nivel nacional están centradas en el ministerio de Economía de Martín Guzmán y en Producción, que conduce Matías Kulfas, aunque también participa el ministro de Turismo Matías Lammens.
“El turismo es la actividad más afectada y todos lo saben -señaló García Bertone-. Entiendo que el gabinete económico está tratando de buscarle alguna vuelta”.
Hoy la hotelería en Bariloche trabaja a media máquina y todavía hay muchos establecimientos que se mantienen cerrados, especialmente los que se ubican en pleno centro.
Según la titular de la Cámara de Turismo, en el último relevamiento realizado para Navidad la ocupación general de plazas turísticas en Bariloche era del 28%, aunque con un reparto muy desigual: las cabañas lograban un 60% y la hotelería no superaba el 8/10%.
El secretario de Turismo del municipio, Gastón Burlón, confirmó que no existieron grandes cambios en los últimos días y estimó que las cabañas se mantienen en un 60 y la hoteleria ronda el 25% de ocupación.
García Bertone afirmó que el ATP, por el cual las empresas recibían el equivalente a un salario mínimo, vital y móvil por trabajador fue liquidado por última vez con los sueldos de diciembre y la primera señal negativa que recibieron fue comprobar que “en el presupuesto 2021 había desaparecido”.
Explicó que ahora “se habla de un Repro, que sería algo distinto, unos 9.000 pesos por empleado ”, es decir la mitad del aporte anterior. La empresaria recordó que la ley de Sostenimiento y Reactivación Productiva del Turismo -aprobada en septiembre- prevé mecanismos de asistencia específica por otros 180 días y que el beneficio al que aspiran podría componerse de “un Repro más un auxilio extraordinario”.
El secretario general del sindicato gastronómico de Bariloche, Nelson Rasini, ya había señalado también hace algunos días su inquietud ante la imposibilidad para los trabajadores de asegurarse el cobro de salarios si el Estado retira su apoyo.
Según García Bertone, el movimiento turístico progresa “con mucha lentitud”, porque influyen “el virus, y también los temores de la gente”.
Señaló que la reactivación llevará tiempo y, aun sin las restricciones que regían hace un par de meses, el turismo en toda la región “vive días complicados”. Mencionó como un factor extra “la expectativa que había por la apertura de fronteras con Chile”, porque en verano la hotelería local trabaja mucho con ese público.
Pero reconoció que “las señales no son buenas” en ese sentido, ya que no habría permisos para el turismo de países limítrofes en el corto plazo.
Créditos, otro capítulo.
En relación con los créditos blandos que recibieron las empresas turísticas desde el inicio de la pandemia, García Bertone refirió que existe una política orientada a extender plazos y períodos de gracia, que desde Nación encomendaron negociar en forma individual con cada banco y que habrían encontrado eco favorable. Especialmente en el banco Patagonia, que asistió en mayor porcentaje a la hotelería local.
Dijo que “con la provincia es distinto porque si bien los montos fueron menores hay otro margen, ya que los créditos se otorgaron un año de gracia y la amortización empieza en julio”. García Bertone señaló como otro dato preocupante que “el banco Nación tenía una línea de créditos para el turismo con tasas muy convenientes, pero ya la dieron de baja”.
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