Un acuerdo con el privado permitirá regularizar una populosa toma en el Alto
Residen unas 300 familias. El municipio intervino para avanzar en la regularización.
Un acuerdo con el privado permitirá regularizar una populosa toma en el Alto
La presidente del Instituto Municipal de Tierras y Viviendas, Laura Zannoni, aseguró que en relación con la toma 29 de Septiembre la prioridad del municipio es “mejorar la calidad de vida” de sus habitantes y en esa línea se inscribe el acuerdo alcanzado con el propietario de las tierras, que permitirá “levantar las medidas cautelares y frenar la ejecución judicial”.
La semana pasada el intendente Gustavo Gennuso firmó con el titular del predio de 20 hectáreas un “acta de intención” que fue presentada como “un primer paso” hacia la regularización de la situación dominial de las 300 familias.
El asentamiento está ubicado sobre la ruta 40 sur, a continuación del barrio 2 de Abril, y comenzó a conformarse en 2012. La mayoría de las construcciones son precarias, pero algunas son de mampostería y ya existen casas de dos plantas. Los vecinos se niegan a retirarse y quieren pagar por las tierras.
Zannoni dijo que el propietario inició ya unas 50 demandas de desalojo y que consiguió el dictado de medidas cautelares, que dificultaron, por ejemplo, la instalación de tableros eléctricos comunitarios, para evitar las conexiones clandestinas y el riesgo de incendios.
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Dijo que por esa misma razón fue imposible avanzar con el trazado de calles, lo cual agrava los problemas “porque no pueden entrar las ambulancias ni las autobombas”. Ya hubo varias casas quemadas en el barrio, incluso con víctimas fatales.
Gennuso aseguró que la decisión de regularizar la toma “es algo muy importante para la ciudad” y señaló que el acta de intención firmada es “el primer paso de muchos” en ese proceso.
Zannoni subrayó la necesidad de que los vecinos se organicen para avanzar con las nuevas etapas hasta lograr una adjudicación de los lotes “a valor social”.
Consultada por este diario, confirmó que la única alternativa que estudia el Instituto de Tierras es “consolidar” la toma en el lugar, y que la relocalización está descartada. El objetivo, dijo, es “alcanzar la paz social y evitar el desalojo”.
Según informó, la primera medida que permitirá el acuerdo con el propietario será “el ingreso del agrimensor” para urbanizar el área.
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