«Bati» cumplió el papel que le dieron

IBARAKI, Japón (Diario Olé).- Con sus anteojos azules bien modernos, Gabriel Omar Batistuta luce relajado. Contento y ganador. No es para menos, anotó el tanto del triunfo ante los nigerianos y cumplió su papel a la perfección por el que había sido elegido para este debut mundialista.

La selección le ganó 1-0 a Nigeria en el debut mundialista y, tras el empate entre ingleses y suecos, encabeza las posiciones en el Grupo F.

«Fue mejor de como pude haberlo soñado. Yo sólo quería ganar», arranca el delantero de Roma. En todo momento de su charla con la prensa, Bati intenta sacarse méritos. Y lo resalta: «El mérito fue de todo el equipo, que jugó un fenómeno. Nigeria sólo pateó dos o tres veces al arco».

Al menos públicamente, el ex jugador de Newell»s, Ríver, Boca y Fiorentina no quiere hablar de records personales. Cuando se lo consultó si pensaba en superar la marca del alemán Gerd Müller (14 goles en Mundiales), Bati contestó cortito y preciso: «En lo único que pienso es en jugar «.

Ya ganó el primero. Según Batistuta, a la selección «sólo le faltan los tres o cuatro puntos para pasar de ronda». El máximo goleador de la historia del seleccionado nacional (llegó a 56 tantos con el que le anotó a Nigeria) no quiso ponerle un puntaje a su actuación.

«Ni cuatro, ni siete, ni seis. Los puntajes son relativos cuando se consigue el objetivo de ganar. Lo importante es lo que considera el técnico y, luego, lo que piensa cada uno. Yo estoy muy satisfecho con la forma en que jugué», afirmó.

«Cómo no voy a jugar otro mundial, estoy feliz de haber tenido la suerte de hacer un gol en cada primer partido de Argentina que jugué», afirmó Batistuta en diálogo con la prensa internacional al término del encuentro.

«Estoy contento porque el equipo ganó y entonces nos vamos todos a esperar a Inglaterra tranquilos. Al equipo lo vi bien porque un primer partido nunca es fácil. Tuvimos personalidad porque manejamos el desarrollo durante los noventa minutos», agregó el delantero de la Roma italiana.

En relación con su actuación, Batistuta remarcó que lo importante fue que «Marcelo Bielsa está contento» con lo que le brindó al equipo y avisó que hoy no le importa que lo califiquen «con un cuatro, un seis o un siete».

El «Bati», que con el de ayer sumó 56 goles con la camiseta argentina y llevó a diez su cuenta personal en mundiales, fue reemplazado a diez minutos del final del partido precisamente por su gran competidor en el puesto: Hernán Crespo.

Respecto de esa variante, Batistuta afirmó que él se lo había pedido a Bielsa. «Estaba bastante cansado y un poco acalambrado. Pero eso pasa porque Argentina se puede dar el lujo de rotar jugadores», señaló.

El hombre de Reconquista no se achicó cuando un cabezazo suyo se fue por arriba. «Sabía que iba a tener otra chance, que ésa no iba a ser la última del partido», contó.

Al final del partido, cuando volvió a la cancha para saludar a sus compañeros, Bati cambió la camiseta. «No sé con quién la cambié. No tengo idea», confió sonriente.

El próximo compromiso de Argentina es uno de los partidos más esperados de la primera fase de la Copa del Mundo, el enfrentamiento con Inglaterra.

«Batigol» está tranquilo:»No siento ninguna presión en particular. Tomo ese partido con la misma intensidad que cualquier otro del Mundial. Así debe ser porque por algo están en el torneo».

Es palabra del goleador.

El debutante inesperado

IBARAKI, Japón (Diario Olé).- Está como si hubiese terminado de jugar un partido con sus amigos del barrio. Sereno y sin excitación. Diego Placente habla y explica con asombrosa naturalidad su debut inesperado en la formación titular de Argentina en el Mundial.

«Todo fue muy particular. Estaba entrando en calor y me dijeron que iba a jugar. Uno se pone nervioso…», acepta el defensor de Bayer Leverkusen.

«En el momento, pensás muchas cosas. Después, jugás más tranquilo. Además, yo juego igual en todos lados porque es parte de mi personalidad», agrega.

Diego estaba preparado para ver el partido sentado en el banco de suplentes. Hasta que la inesperada lesión de Roberto Ayala, capitán y figura inamovible en el esquema de Bielsa, le cambió los planes. «El preparador Bonini me dijo que iba a jugar y a los cinco minutos tenía que salir a la cancha. La verdad es que no afectó mucho, aunque al principio, en serio, estaba nervioso», afirma.

«Tomar la marca no fue un problema. Todos los defensores estábamos al tanto de lo que podía pasar, pero obviamente me encontraba más relajado que si hubiera sabido que iba a jugar», confiesa.

«Habíamos visto videos de los defensores nigerianos. Sabíamos todo. Conocíamos los detalles igual que los titulares», añade. «Yo estoy conforme con mi rendimiento, pero uno piensa más en lo colectivo que en lo suyo. Es más importante ganar que lo individual», analizó el ex jugador de Argentinos y Ríver.