Bocinazo en Roca contra las restricciones y «la falta de empatía» de los gobiernos
Una nutrida caravana de vehículos recorrió las calles de la ciudad para rechazar el cierre obligatorio de comercios durante los próximos días.
La movilización recorrió el centro y llegó hasta las viviendas de dirigentes políticos de la ciudad.
Fotos: Luis Leiva
Los automovilistas recorrieron las calles céntrica de Roca y manifestaron su enojo por las nuevas restricciones. (foto: Luis Leiva)
Más de 150 vehículos protagonizaron esta noche una protesta por las calles de Roca, en rechazo de las restricciones impuestas por el gobierno nacional en el marco de la segunda ola de coronavirus.
La ausencia de medidas que permitan atenuar el impacto de los cierres obligatorios en el sector comercial fue uno de los factores principales de la movilización, que cerca de la medianoche del viernes todavía recorría el centro roquense.
Por otra parte, la falta de información precisa surgida desde los ámbitos provincial y municipal también generó malestar. Dueños de locales que se comunicaron con este medio expresaron su indignación por «la liviandad» con la que abordaron la situación los gobiernos encabezados por Arabela Carreras y por María Emilia Soria.
En ese sentido, la Cámara de Agricultura Industria y Comercio emitió en las últimas horas del viernes un comunicado, exhibiendo su indignación con las autoridades. «Impotencia, desilusión y abandono» fue el título elegido para ese documento.
«Los que arriesgamos y aportamos la mayoría de lo que generamos al Estado, estamos desconcertados. Pasada la terrible experiencia de la cuarentana 2020, con la peor destrucción económica vista en nuestra historia, asistimos impávidos a la falta de previsión y negación absoluta a los aportes y sugerencias del entramado productivo», expresaron desde la entidad.
Luego recuerdan que «las cámaras empresariales, cuyos miembros trabajan sin remuneración alguna, hemos acompañado, contenido y capacitado a sus miembros, apostando siempre al dialogo constructivo». Sin embargo, advierten que «hoy esos miembros ya no creen en el diálogo, nos exigen medidas más duras».
«El Estado nos demuestra que no le importamos en lo más mínimo. Y lamentablemente la sociedad toda no entiende de dónde salen los recursos que el Estado usa a su discreción. Recursos que hoy son finitos y están desapareciendo», puntualizó el documento de CAIC.
El diagnóstico concluye afirmando que «el abandono a las Pymes es lamentable» y que «la ceguera del Estado hacia un sector que siempre fue proactivo y demostró acompañamiento absoluto a todas las arbitrariedades a las que lo sometía ese Estado ambicioso de recursos es inentendible».
«La clase política ha demostrado su total falta de empatía y ceguera ante una realidad que demanda soluciones creativas, no recetas imaginadas desde un escritorio. No podemos pedir otra cosa que Dios y la Patria se lo demanden», finaliza el comunicado.
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