Comenzó en Roca la campaña de vacunación a niños menores de 11 años

Los niños de las salas de 4 y 5 años del Jardín 11 comenzaron esta mañana a recibir la primera aplicación.

Cerca de las 11, más de medio centenar de niños de distintas salitas del Jardín de Infantes Independiente N°11, ya había recibido su primera dosis de la vacuna Sinopharm lo que generó una gran alivio para muchos docentes y padres quienes se mostraron satisfechos con el comienzo de la campaña.

«Nunca tuve dudas. Mi esposa trabaja en el hospital y con esta vacuna, ya estamos todos inmunizados», comentó Rómulo, el papá de un niño de salita de 5 quien se encontraba primero en la fila para acceder a uno de los espacios que fue adaptado especialmente en el edificio escolar ubicado en calle Villegas casi 3 de Febrero.

Minutos antes de las 9, el personal del hospital Francisco López Lima comenzó a descargar las cajas con las vacunas y el equipo necesario ante la mirada atenta de varios padres con sus hijos que comenzaban a formar una larga fila en la vereda para acceder al vacunatorio.

A este establecimiento asisten más de 200 niños en los dos turnos (salas de 4 y 5 años) y el jueves, cuando se conoció la información, se generó una gran demanda de parte de los padres de los niños quienes inmediatamente comenzaron a buscar información vinculada a la campaña anunciada por el Ministerio de Salud de Río Negro.

La directora del Jardín 11, Gladys Conquet, explicó que afortunadamente todo se resolvió sumamente rápido y que en poco tiempo organizaron el operativo y distribuyeron la información entre los alumnos para que todos los padres estén al tanto de la campaña.

Gladys Conquet, directora del Jardín N° 11. Fotos: Juan Thomes

«Algunas respuestas las podíamos dar pero otras, con información más precisa, no. Yo creo que más familias se irán sumando a la campaña cuando vean que muchos papás están vacunando a sus hijos«, explicó.

Y en esta línea recordó que los pequeños deberán concurrir con su padre o tutor y con una declaración jurada con el consentimiento para que el alumno reciba la aplicación. También el personal de Salud recomendó asistir con la libreta de vacunación para cotejar que los chiquitos tengan todos los esquemas completos para su edad.

La directora explicó que seguramente en el turno tarde llegará otra tanda importante de padres que buscarán concretar este proceso de inmunización en los pequeños. «Para nosotros es importante porque nos permite mantener la presencialidad», dijo.

«Sí…me duele»

Cómo podían, los padres trataban de calmar a los pequeños que ya ingresaban a la sala con lágrimas en los ojos, a la espera de recibir su dosis. Algunos amagaban a salir corriendo, otros se aferraban a los brazos de sus padres o madres, mientras que otros trataban de cerrar los ojos y fingir que no sucedía nada.

Pero la respuesta de uno de los niños arrancó más de una sonrisa en el vacunatorio del Jardín 11. Con una inmensa paciencia, la mamá del pequeño trató de calmarlo tras la aplicación. Con una afectuosa y paciente caricia, la madre le repetía una y otra vez que no había pasado nada. «¿Viste..? No dolió», le dijo.

La respuesta del pequeño no se hizo esperar y mientras se refregaba los ojos le respondió de manera enfática: «Si mamá…sí duele».


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios