Condenarán a una agente de viajes a 3 años de prisión efectiva por estafas

Magdalena López Giovanelli, la agente de viajes acusada de estafar a 56 familias de Bariloche en la contratación de viajes al exterior, admitió este lunes su responsabilidad en todos los hechos y será condenada a 3 años de prisión efectiva y 6 años de inhabilitación para cualquier tipo de actividad comercial.

La mujer -junto al defensor oficial Marcelo Álvarez Mellinger- escuchó esta tarde cada uno de los hechos en un juicio abreviado acordado entre la Fiscalía, la defensa y los cinco abogados querellantes (Raúl Ochoa, Alejandro Bianco Dubini, María Rodrigo, Estanislao Cazaux y Luciano Stella) que patrocinaron a 14 familias damnificadas.

Ante la mirada atenta de los afectados, que pagaron cuantiosas sumas de dinero por viajes al exterior que no pudieron concretar, López Giovanelli, con un tono de voz bajo, admitió los hechos con dos frases que repitió ante cada consulta del juez Héctor Leguizamón Pondal: “soy responsable en el hecho” y “sí, lo admito”.

López Giovanelli será condenada por 50 hechos bajo la modalidad de estafa genérica, 5 casos por defraudación por el uso no autorizado de datos de tarjetas de crédito y un sexto hecho defraudatorio, según precisó la fiscal Alejandra Bartolomé que estuvo a cargo de la investigación con la colaboración de la fiscal Silvia Paolini.

El juez Leguizamón Pondal, tras escuchar la enumeración de los hechos sucedidos en el período comprendido entre febrero de 2016 y abril de 2017, postergó para este martes a las 14 la homologación del acuerdo de partes al que llegaron la Fiscalía, las querellas y el defensor oficial en representación de López Giovanelli.

Según atribuyó la fiscal Bartolomé, la mujer vendió paquetes turísticos, pasajes aéreos, contratación de autos de alquiler en destino, alojamientos y excursiones, entre otros servicios, a los 56 damnificados sin cumplir con el contrato y en ningún caso remuneró a los afectados.

La operatoria utilizada por López Giovanelli tenía como denominador común aprovechar la confianza generada por su amplia trayectoria en el rubro turístico y valerse de dos estructuras comerciales para operar, como las agencias de viajes Butterfly y Net Sur, ambas con oficinas céntricas en Bariloche.

Según la fiscal, la acusada entablaba vínculos de amistad con algunos damnificados y utilizaba otros medios engañosos para generar mayor credibilidad en su actividad como por ejemplo informarles por mail el plan de viaje, remitir copia de reservas de vuelos, alojamientos y contratación de seguros de viajes supuestamente realizados, que en muchos casos eran apócrifos y en otros, se cancelaban por la falta de pago.

López Giovanelli percibió de sus clientes pagos en efectivo en pesos argentinos, en dólares, transferencias bancarias y pagos con tarjetas de crédito, por la contratación de viajes a Brasil, Cuba, República Dominicana, Europa, Turquía, Disney, Miami, México, entre otros destinos.

La fiscal detalló la prueba obtenida a través de información de las entidades bancarias, las aerolíneas, recibos de pagos emitidos por la acusada y documentación que se encontraba en la computadora secuestrada en la vivienda particular de la mujer. El abogado defensor aclaró en este punto que López Giovanelli colaboró con la investigación al aportar su computadora y entregar el posnet con el que realizaba las transacciones con tarjetas de crédito.

El monto global de la estafa supera los 5 millones de pesos, según estimaciones extraoficiales. Tras la resolución de la causa penal, ahora los damnificados pueden iniciar demandas civiles para ser indemnizados por la estafa.

Libre hasta el juicio

El pedido de prisión preventiva solicitado por la fiscalía en el inicio de la investigación, en 2017, no prosperó y Magdalena López Giovanelli esperó el juicio abreviado en libertad, tras dos años y ocho meses de proceso judicial.

Las primeras denuncias por estafa contra la agente de viajes de Bariloche surgieron a fines de abril de 2017 cuando la mujer dejó de responder a sus clientes, quienes no pudieron realizar sus viajes, y desapareció de la ciudad. López Giovanelli estuvo prófuga y se refugió en Chubut pero días más tarde fue detectada en el hospital de El Bolsón a donde debió ser internada.

La mujer nunca estuvo presa y la familia pagó un seguro de caución de 150.000 pesos para que conserve la libertad con pautas de conducta.

La investigación a cargo de la fiscal Alejandra Bartolomé fue exhaustiva y recolectó documental y confirmaciones de diversas entidades bancarias, aerolíneas, servicio de posnet y la Dirección de Migraciones que constató que los damnificados no salieron del país porque sus viajes fueron cancelados ante la falta de pago de la operadora.

El procedimiento judicial desde el primer día se enfocó en López Giovanelli, quien realizó los contratos de viajes de manera personal con cada uno de los afectados y quedaron desvinculadas las agencias de viajes Net Sur y Buterfly, desde donde operaba la mujer.