El Huevo Acuña y su sorpresiva llegada a River: así fue la operación
La negociación empezó la semana pasada, con una charla entre Jorge Brito y su par de Sevilla. El rol de Pezzella fue clave y el llamado de Gallardo cerró el círculo.
River metió una bomba en el mercado de pases con la contratación de Marcos Acuña y se encamina a armar una defensa de lujo para afrontar la Copa Libertadores y el Mundial de Clubes 2025. La negociación se realizó en silencio, empezó la semana pasada y en las primeras horas del domingo hubo acuerdo total.
La resonante vuelta de Marcelo Gallardo al banco de River se dio con muchos pedidos a la dirigencia. El Muñeco metió mano de manera firme y el lateral izquierdo fue un punto clave. Nunca tuvo en cuenta a Franco Carboni, una de las apuestas de Martín Demichelis, tampoco contempló –y borró- a Federico Gattoni para esa función y rápidamente se dio cuenta de que el nivel de Enzo Díaz y Milton Casco no era de los mejores. Pidió un 3 y vaya si le dieron el gusto, porque le trajeron al campeón del mundo y bicampeón de América.
Así empezó la negociación entre River y Sevilla
La semana pasada, Jorge Brito, presidente de River, se comunicó con su par de Sevilla, José María Del Nido Carrasco, quien rápidamente le abrió la puerta para concretar el traspaso. La buena relación entre las dirigencias, que hace tres años acordaron la transferencia de Gonzalo Montiel, fue el primer punto positivo.
Después entraron en escena otros protagonistas. Germán Pezzella, socio del Huevo en la Selección Argentina, pero también amigo, metió segunda y el broche lo puso Marcelo Gallardo, quien se comunicó con el lateral-volante y terminó de convencerlo. Así, a pocas horas del empate con Gimnasia, cuando el Muñeco afirmó que el Millonario iba a seguir metido en el mercado, se concretó el pase.
El Huevo tenía decidido dejar Sevilla: los motivos
La relación de Marcos Acuña con el cuerpo técnico y la dirigencia fue muy tensa en la última temporada y el motivo principal fueron las lesiones que sufrió el lateral de Zapala. Desde agosto del año pasado hasta la fecha el ex Ferro y Racing padeció contusión de cadera en tres oportunidades, problemas musculares en dos ocasiones y una lesión en el tendón de Aquiles.
Ante esa situación, Acuña estuvo inactivo durante 107 días y se perdió 18 partidos del Sevilla entre LaLiga, Copa del Rey y fase de grupos de la Champions League. Por esa misma causa, no fue convocado por Lionel Scaloni para los partidos que la Selección Argentina disputó en las primeras dos fechas de las Eliminatorias ante Ecuador y Bolivia. Entre algodones, volvió para disputar la Copa América, en junio, pero la dirigencia del club español ya tenía decidida su salida. Y también el Huevo.
Los fuertes rivales de River para contratar a Acuña
Aston Villa, con otro socio campeón del mundo como Dibu Martínez, parecía el destino para Marcos Acuña hasta la semana pasada. La Premier League era un tentadora y seriamente, el Huevo pensó en hacer las valijas dentro del Viejo Continente. En el medio se mencionó una chance del fútbol árabe y antes de la Copa América, se había reflotado una posibilidad italiana con Juventus, que varias veces intentó contratarlo.
La primera chance para volver a Sudamérica ya tuvo un toque riverplatense, porque Ramón Díaz lo pidió para Corinthians. La oferta era seductora, pero casi en simultáneo se dio el llamado de River y ahí fue historia sellada. Pezzella, Gallardo y también un visto bueno familiar que fue clave, armaron un combo irresistible para el Huevo, que llegará en las próximas horas para hacerse la revisión médica y ponerse la banda.
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