Doce años de prisión por un asesinato en Cipolletti

La Justicia condenó a 12 años de prisión a Pablo Peña por el homicidio de Pedro Antinao. El hecho, que tomó relevancia porque la fiscalía intentó encuadrarlo como femicidio vinculado, ocurrió en la madrugada 7 de noviembre de 2015. Los familiares de la víctima quedaron disconformes con el monto de la pena.

El fiscal en jefe Gustavo Herrera no pudo probar la figura del femicidio vinculado durante el debate oral y acusó al imputado de homicidio simple. En la audiencia de alegatos Herrera había pedido 18 años de prisión teniendo en cuenta como agravante que Peña tenía antecedentes penales. La defensora pública Silvana Ayenao había solicitado la absolución aduciendo que se trató de una defensa personal.

El tribunal desacreditó la teoría de la defensa aludiendo que el homicidio aconteció como consecuencia de una pelea que protagonizaron la víctima y el victimario en la intersección de las calles Scalabrini Ortiz y Julio de Caro. Para definir la pena el tribunal tuvo en cuenta la naturaleza y la modalidad de los hechos, además de las condición social del imputado y los antecedentes penales que registraba. Según la presidenta del tribunal, Alejandra Berenguer, quedó probado que en la madrugada del aquel 7 de noviembre de 2015 el imputado le propinó cuatro puñaladas a Antinao en la zona del abdomen y el tórax provocándole la muerte.

La noche del asesinato, la víctima caminaba junto a su pareja quien tiempo antes había mantenido una relación con el imputado.

Según la mujer, cuando Peña supo de su relación con Antinao comenzaron los problemas, incluso acentuó la mala relación que tenían Peña y Antinao, quienes eran viejos conocidos del barrio.