Para los comercios de Bariloche, la desventaja de precios con Chile está “peor que nunca”

Dirigentes empresarios reconocen que el impacto es grande en indumentaria, electrodomésticos y útiles escolares. Se quejan de los impuestos.

El dato entre los consumidores suele circular con rapidez y el circuito está aceitado: cuando los precios en Chile se tornan favorables en la comparación con el comercio local, comienza el desfile incesante por el paso Cardenal Samoré de quienes van en busca de las ofertas imposibles de encontrar de este lado de la frontera.

El fenómeno se extiende en toda la región. Pero Bariloche y más aun La Angostura sienten el impacto de inmediato por la cercanía con Osorno, un gran polo comercial que permite realizar el viaje en el día, sin pernocte, y con apenas un tanque de nafta.

El presidente de la Federación de Entidades Empresarias de Bariloche, Leonadro Marcasciano, dijo que la historia demuestra que el contexto favorable para los compradores de uno u otro país tiene épocas. pero que el actual es “no un momento, un momentazo” desfavorable para Bariloche y la zona.

“El diferencial es muy importante y nos afecta claramente -afirmó-. Hemos tenido épocas malas, pero esta es peor que nunca”. Señaló que en su caso necesitaba un electrodoméstico que acá cuesta 259.000 pesos y en Chile encontró una agresiva oferta por “exactamente el mismo artículo” que al cambio daba 50.000 pesos.

Señaló que electrónica, calzado e indumentaria en general son los rubros más perjudicados, “y en esta época también las librerías”, porque ante el comienzo de clases es un clásico el éxodo de barilochenses que peregrinan a Osorno para las compras de útiles y uniformes. Señaló además que las liquidaciones, del otro lado de la cordillera “son liquidaciones de verdad”.

El presidente de la Cámara de Comercio, Elián Caramichos, reconoció también que la asimetría de precios existe “y se nota fuerte en electrodomésticos”, lo mismo que en la ropa. Pero señaló que la competencia de Chile es solo un factor que les juega en contra, al que se le suma el continuo crecimiento del comercio vía internet.

“No sé si es el peor momento, pero sí que el impacto es duro para el comercio local -refirió el empresario-. Influye que la gente está más ajustada que otras veces y está muy atenta a hacer rendir la plata”.

Refirió que en la conformación de precios a uno y otro lado influyen variables como la relación peso/dólar -que en Argentina evolucionó el último año muy por debajo de la inflación- y también el esquema tributario, en el que prefirió poner el acento.

Caramichos dijo que “el gobierno nacional está marcando una ruta de reducción de márgenes y de costos, mientras que en Río Negro eliminan el descuento de Ingresos Brutos, que lo paga todo el mundo, incluso la pyme que está en bancarrota”.

A su juicio, lo que hace falta en la Argentina es “un trabajo prolijo y paulatino” para reconstruir la competitividad. Y las empresas deben adaptarse con las herramientas que tengan a mano. “Pero no nos la están haciendo para nada fácil”, se quejó.

También Marcasciano aportó cuestionamientos parecidos. Dijo que “la carga impositiva de este lado es tremenda: De cada 100 pesos que uno paga de sueldos tiene entre 60 y 67 pesos de impuestos al trabajo, mientras que en Chile son 5 pesos”. Dijo que lo ocurrido con Ingresos Brutos “es absolutamente contrario a lo que se necesita”, e influye mucho en el precio final porque “se aplica a toda la cadena”.

Distorsiones acumuladas para los comerciantes de Bariloche


Jorge Elvira es titular de una cadena de electrodomésticos nacida en Bariloche y con presencia regional. Consideró que la situación actual “golpea mucho” porque el sector “no terminó de salir de la crisis”. Sostuvo que en su actividad el impacto mayor es en electrónica, computadoras y teléfonos, “y no tanto en heladeras o lavarropas”, por la menor facilidad para entrar esos productos.

“Son ciclos y siempre los hemos visto. Yo he tratado de desentenderme, porque no es algo que podamos modificar, pero claro que golpea mucho”, aseguró. También cuestionó los efectos de los impuestos y la intermediación. Dijo que “si se pudiera investigar el valor de origen de un producto hasta el punto final, se comprobaría que la carga tributaria en cada eslabón es elevadísima”.

Chile, en cambio -dijo Elvira-, “tiene una estabilidad y una coherencia de 40 años que uno les envidia sanamiente y que les ha permitido constituir una clase media con una calidad de vida cada vez mejor y que ha superado a la Argentina”.

Elvira también apuntó contra los beneficios fiscales en Tierra del Fuego, donde hay grandes ensambladoras de productos que se venden en sus comercios. “Hay que sostener la isla, parece, y es un problema político -reflexionó-. Tierra del Fuego así no le sirve al país. No existe en ningún lugar del mundo un parque industrial a 3.400 kilómetros de los centros de consumo por una cuestión de soberanía. Todo eso va a precio y lo paga el consumidor”.

Marcasciano dijo que si las ventas no se derrumbaron todavía más en el ámbito local es por la reaparición del crédito, que les concede una ventaja cualitativa con Chile. Pero en precios la diferencia es “sideral”.


El dato entre los consumidores suele circular con rapidez y el circuito está aceitado: cuando los precios en Chile se tornan favorables en la comparación con el comercio local, comienza el desfile incesante por el paso Cardenal Samoré de quienes van en busca de las ofertas imposibles de encontrar de este lado de la frontera.

Registrate gratis

Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento

Suscribite por $750 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora
Certificado según norma CWA 17493
Journalism Trust Initiative
Nuestras directrices editoriales
<span>Certificado según norma CWA 17493 <br><strong>Journalism Trust Initiative</strong></span>

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios