El BID advierte riesgos por la situación bancaria

La entidad financiera consideró que el crédito que le otorgó a Río Negro traerá importantes beneficios para la provincia, pero también alertó sobre las dificultades que podría sufrir su implementación, derivadas de la situación bancaria del país. Las ventajas serán la mayor competitividad, la creación de nuevos empleos y que

VIEDMA (AV)- El Banco Interamericano de Desarrollo con-fía en que el préstamo de modernización productiva otorgado a Río Negro repercutirá favorablemente en el aumento de la competividad del sector, de las exportaciones y de los ingresos. También reconoce como riesgos que no exista respuesta privada, que no se sumen los bancos con fondos o la dificultad de las pequeñas empresas de acceder a los préstamos programados.

Este análisis conforma el estudio técnico del BID, que se extiende en más de 50 páginas y constituyó la aprobación del préstamo a la provincia de Río Negro por casi 52 millones de dólares. El programa -que totaliza 86 millones- se completa con la contrapartida provincial, que se sostiene esencialmente en un aporte de los bancos que participarán en la mediación de los préstamos.

Esos créditos se destinarán a pequeñas y medianas empresas de cualquiera de las actividades productivas.

La evaluación del banco -en la que participaron una docena de técnicos- afirma que «el beneficio del programa se manifestará básicamente en el aumento de la competitividad del sector productivo privado, el mejoramiento de su posición de exportador e incremento de los ingresos. Las nuevas inversiones -agrega- crearán nuevas fuentes de empleo y mejorará la recaudación fiscal para fortalecer el saneamiento de las finanzas públicas, debido al crecimiento de las bases imponibles de los tributos provinciales».

También se estima que «habrá una atracción de nuevas inversiones privadas hacia la provincia, ya que la estabilidad y la modernización de la actividad regulatoria provincial creará un ámbito propicio» para las inversiones a largo plazo.

Entre otros beneficios, el BID enumera «la diversificación de la producción y de los mercados, modernización tec

nológica, creación de proyectos asociativos en los sectores frutihortícola y turismo, y el desarrollo de la marca regional».

 

En cambio, el estudio del banco consigna como riesgo principal que «no exista la disposición del sector privado de invertir en la modernización productiva». El BID asocia esa si- tuación al «marco sociopolítico del país y que se mantenga una relación de precios internacionales aceptable».

Aclaró que se identificó «una masa crítica de pequeños y medianos empresarios con proyectos de inversión, con historia, con disposición a aportar garantías y cofinanciamiento para complementar créditos denominados en dólares».

Pero alertó que existe riesgo en el acceso al crédito si «no se desarrollan las con

diciones necesarias para la operatoria interna del Fondo de Apoyo a las Pymes» Por caso, se «consigna que no se cuente prontamente con un número razonable de bancos (IFI) elegibles, dada la delicada situación financiera» del país.

En ese sentido, el trabajo del BID advierte del «deterioro de la solvencia de los bancos participantes», así como también la «existencia de un número suficiente de Pymes que resulten ser sujetos elegibles de financiamiento bancario, de acuerdo con las normas pertinentes del Banco Central» Este riesgo «podría ser significativo si no se concreta el proceso de normalización» del sistema financiero Consideró que «se observa una clara mejora de la situación», por lo cual «se estima que su impacto podría resultar significativo solamente durante el primer año de ejecución». (AV)


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