El Brent cierra un mes marcado por la volatilidad
El barril de referencia para Argentina osciló entre los 70 y los 64 dólares este mes, atrapado entre la presión de la OPEP+ por sumar producción y las sanciones de Estados Unidos a gigantes petroleros de Rusia.
El último mes del mercado energético cerró con el barril de petróleo Brent en un tobogán de precios, pasando de rozar los 70 dólares a fines de septiembre a caer hasta los 64,69 esta mañana. Esta volatilidad fue la norma, impulsada por una compleja doble tensión: por un lado, las nuevas sanciones geopolíticas contra Rusia y, por el otro, los movimientos estratégicos de la OPEP+ para inundar el mercado con más crudo.
La principal presión bajista provino de los países productores. La OPEP (Organización de Países Productores de Petróleo) y sus aliados abandonaron su esquema de recortes para apuntalar una estrategia más flexible. La preocupación es perder participación de mercado frente a naciones no miembros, especialmente ante el creciente incremento de la producción de crudo no convencional (shale oil) de Estados Unidos.
En este contexto de desaceleración de la demanda global y la necesidad de sostener su cuota, la alianza OPEP+ se inclina por un aumento modesto de la producción para diciembre, incluyendo un incremento de 137.000 barriles por día para noviembre.
El mercado interpreta que esta maniobra es una forma de presionar a los competidores y estabilizar los ingresos de los miembros, incluso a costa de un precio más bajo por barril.
Este anuncio potenció que la volatilidad fluyera hacia la baja, al menor precio en cinco meses para el Brent, una caída que puede generar más daños en la producción shale por su alto costo.
Sanciones a Rusia y el acuerdo con China
A esta dinámica de oferta se sumó el factor geopolítico. Tras un repunte impulsado por las nuevas penalizaciones de Estados Unidos, los inversores comenzaron a evaluar el efecto de las sanciones a Rusia sobre las dos mayores compañías petroleras rusas, Lukoil y Rosneft.
El director ejecutivo de la Agencia Internacional de Energía (AIE), Fatih Birol, sostuvo que el efecto de estas penalizaciones podría ser limitado, dado el excedente de capacidad global.
No obstante, la respuesta de las empresas rusas fue significativa: la segunda mayor productora, Lukoil, anunció la venta de sus activos internacionales a raíz de las medidas occidentales. En paralelo, las refinerías indias, clave para el petróleo ruso, han frenado nuevos pedidos a la espera de claridad del gobierno y sus proveedores, complicando aún más las perspectivas de comercialización del crudo sancionado.
En el panorama macroeconómico, los operadores también están atentos a las negociaciones comerciales entre Estados Unidos y China, los dos mayores consumidores de crudo del mundo. Las perspectivas de un posible acuerdo entre Washington y Beijing impactan directamente en las expectativas de la demanda global, añadiendo una capa más de incertidumbre a la cotización del Brent.
La inestabilidad continuará hasta la próxima reunión ministerial de la OPEP+ fijada para el 2 de noviembre, fecha clave para definir si el grupo profundiza la estrategia de mayor oferta o retoma los recortes.
El último mes del mercado energético cerró con el barril de petróleo Brent en un tobogán de precios, pasando de rozar los 70 dólares a fines de septiembre a caer hasta los 64,69 esta mañana. Esta volatilidad fue la norma, impulsada por una compleja doble tensión: por un lado, las nuevas sanciones geopolíticas contra Rusia y, por el otro, los movimientos estratégicos de la OPEP+ para inundar el mercado con más crudo.
Registrate gratis
Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento
Suscribite por $1500 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora
Comentarios