Gastronómicos retrucan la propuesta del empresariado para los temporarios
En asamblea extraordinaria que se llevó a cabo en el Centro Cívico, los trabajadores temporarios acordaron exigir a los empresarios la solicitud de los ATP para garantizar los salarios durante cuatro meses (y seis para quienes trabajan en turismo estudiantil).
La asamblea extraordinaria se llevó a cabo en el Centro Cívico para garantizar el distanciamiento social. Foto: Alfredo Leiva
Unos 400 trabajadores gastronómicos aprobaron por unanimidad la propuesta del sindicato Uthgra Bariloche para los 2.379 trabajadores temporarios de la región que se encuentran sin ingresos.
La votación se llevó a cabo en la plaza del Centro Cívico para garantizar el distanciamiento social, bajo una persistente lluvia y una temperatura bajo cero.
Las cámaras empresariales habían ofrecido garantizar los 45 días de ingresos para los trabajadores temporarios y 90 días para los empleados del sector estudiantil, establecidos en el convenio laboral zonal. Pero además, el ofrecimiento era pagar la liquidación final recién al final de la temporada.
El gremio fue más allá y propuso que los empleadores soliciten el pago de los ATP para los temporarios, a partir de julio y de esta forma, cubrir 4 meses de trabajo (durante julio, agosto, septiembre y octubre) y, 6 meses para quienes trabajan en turismo estudiantil (hasta diciembre).
“El trabajador temporario es un trabajador efectivo permanente de tareas discontinuas. Si el empresario solicita el alta de los ATP a partir del primero de julio, de esta forma, estiramos el beneficio de los trabajadores”, explicaron al comienzo de la asamblea y la propuesta fue votada por todos los trabajadores y agregaron: “Sin ATP es imposible hacer un acuerdo de emergencia”.
La contrapropuesta de la Uthgra llega después de tres movilizaciones en el Centro Cívico y tres jornadas con cortes de ruta en el puente del río Limay.
Ovidio Zúñiga, de la Uthgra Bariloche, planteó: “No desconocemos la realidad del país y de Bariloche. No somos necios. Pero no se puede cortar el hilo por lo más delgado. Nos jugamos el destino de las familias”.
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