Gutiérrez celebra la reelección en la Legislatura pero sin Figueroa

El vice se pidió licencia. Con un hashtag Yovoy se convoca a los militantes a asistir al discurso que dará el gobernador este jueves ante los diputados. Presentará un proyecto que prevé el reemplazo de legisladoras por otra de su mismo género.

El gobernador Omar Gutiérrez desembarcará el jueves en la Legislatura para rendir cuentas de su gestión ante los diputados provinciales y presentar los proyectos de ley que necesita para relanzar su gobierno, a diez días de ser reelecto por amplio margen. Será en ausencia del vicegobernador, Rolando Figueroa, quien se tomó licencia desde el 13 de marzo luego de dos meses a cargo del Poder Ejecutivo.

La sesión especial comenzará a las 10 y tendrá todos los condimentos de una apertura legislativa, aún cuando esa formalidad haya ocurrido el 1 de marzo, con el gobernador de licencia electoral.

En las redes sociales, la militancia del Movimiento Popular Neuquino comenzó a convocar a los simpatizantes bajo la etiqueta #YoVoy y la consigna de acompañar al gobernador reelecto.

Quien deberá presidir el encuentro, por licencia de Figueroa, será el diputado Pablo Bongiovani, siguiente en la línea sucesoria como vicepresidente primero. El único punto del orden del día será el discurso del mandatario, quien será recibido por los diputados oficialistas Gloria Sifuentes, Encarnación Lozano, María Laura Du Plessis y Lucía Menquínez, y los opositores Pamela Mucci, Javier Bertoldi, Guillermo Carnaghi, Juan Monteiro, Damián Canuto, Oscar Smoljan y Gabriel Romero.

Según se anticipó, entre los proyectos que presentará el mandatario en la Legislatura, habrá uno para establecer que, cuando una diputada renuncie o deba dejar el cargo, sea reemplazada por la próxima mujer que esté en la lista. También ingresará una iniciativa para crear una ley de juventudes “que abarcará la posibilidad de terminar la escuela secundaria, el empleo y los emprendimientos jóvenes”.

En números

9
diputados renovarán sus bancas. El resto finalizará su mandato legislativo el 10 de diciembre.
23
proyectos de ley presentó Omar Gutiérrez en la apertura legislativa de 2018. Al menos cinco no fueron sancionados.

El jueves también podría ser el turno de presentar el Plan 2030, un proyecto de desarrollo a diez años para Neuquén que ya anticipó Gutiérrez en sus últimos días de campaña. En esa ocasión, aseguró que su “último acto de gobierno será presentar la visión estratégica de la provincia al 2050”.

El año pasado, Gutiérrez presentó 23 proyectos en la apertura de sesiones ordinarias, la mayoría de los cuales fueron aprobados en el transcurso del 2018. Le quedó pendiente el cambio en los requisitos para presidir el Consejo Provincial de Educación (CPE), la eliminación de la prohibición vigente para los subsecretarios que son abogados de ejercer su profesión en el ámbito privado y la ampliación del ejido de Villa El Chocón, entre otras.

Una de sus iniciativas aprobadas fue la modificación de la ley de ministerios para agregar la Jefatura de Gabinete, cargo que permanece vacante desde su creación. Esta vez también se especula con una nueva modificación en la estructura del gabinete: Gutiérrez ya anticipó durante la campaña que quiere crear el ministerio de Juventud y uno de Deportes, áreas que hoy comparten jerarquía con Cultura y Gobierno.

También se adelantó que su próximo gabinete será 50/50 entre varones y mujeres, a diferencia del actual, que es de 80/20.

Omar Gutiérrez puede sentirse satisfecho. Su osada convocatoria a elecciones nueve meses antes de vencer los mandatos le facilitó un triunfo y la interpretación constitucional utilizada para justificar su ausencia el 1 de marzo sirvió. No tuvo que sacrificar el discurso a manos del vicegobernador Rolando Figueroa y, en cambio, lo dará este jueves, con su 40% al hombro, en una suerte de relanzamiento de gestión que no admite esperar hasta diciembre.
Quizás por eso el dueño de casa prefirió dejar las llaves y que los electos organicen la fiesta a su gusto. Algo que no podrán hacer los diputados actuales, obligados a dar quórum y escuchar el mensaje, seguramente sin el entusiasmo de los primeros años. Sólo nueve de los 35 renovaron su banca. El resto ya teme convertirse en calabaza cuando el calendario marque el 10 de diciembre. En los pasillos de Leloir dicen que “hay olor a velatorio”.


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