Homicida de Bariloche escapó en Cipolletti

CIPOLLETTI (AC).- El detenido José Ariel Aguirre escapó ayer a la madrugada del penal de Cipolletti y es intensamente buscado por una comisión policial. Fue calificado como un “interno peligroso” y estaba condenado a 11 años de cárcel por el asesinato de su tío, que ocurrió en diciembre del 2011 en el barrio Nahuel Hue de Bariloche. Un fiscal cipoleño inició una investigación de oficio por la fuga. No se conocieron precisiones sobre el escape. Se supo de manera extraoficial que los penitenciarios advirtieron la ausencia de Aguirre alrededor de las 5 de ayer. Estaba alojado en el primer piso de un pabellón de la cárcel del paraje El Treinta. Aguirre es conocido con el apodo de “Tati”. Tiene 30 años, el cabello negro, barba, mide 1,62 metros y posee tatuajes en varias partes del cuerpo. En septiembre del año pasado fue condenado por la Cámara Segunda de Bariloche a 11 años de cárcel. Según el expediente, Aguirre, su concubina y otro sujeto se presentaron en la casa del tío, Aníbal Castro Jeldres. El imputado entró al patio y preguntó por él. Cuando salió su tío, sin decir nada, le disparó al menos cuatro veces hasta que el arma se trabó. Dos proyectiles impactaron en la víctima. En el juicio, el fiscal sostuvo que Aguirre quedó comprometido por los testimonios de la mujer y de dos hijos de Castro Jeldres. La defensa recordó que tres horas antes del crimen, un hijo de Castro Jeldres había matado al hermano de Aguirre y trató así de justificar el ataque. Cuando le concedieron las últimas palabras, el acusado dijo que era inocente, que tenía una hija pequeña y pidió “una oportunidad”. Aguirre cumplía la condena en el penal de Cipolletti, que está al límite de su capacidad. Ayer ninguna autoridad de la cárcel comunicó oficialmente cómo ocurrió la fuga. El fiscal de turno José Rodríguez Chazarreta inició una investigación de oficio.