Ingenieros de Bariloche diseñan un prototipo de respirador
No tiene la complejidad de los usados en un hospital, pero automatiza las bolsas usadas en primera asistencia.
Respirador made in Bariloche. Una estructura de fibrofácil con un motor acciona la bolsa.
El avance de la pandemia del coronavirus concentró a profesionales de diversos perfiles en distintos rincones del mundo que se dispusieron a compartir sus conocimientos para ofrecer posibles soluciones a los problemas que van surgiendo.
Cuatro jóvenes de una pequeña empresa de tecnología de Bariloche se sumaron al movimiento denominado Coronavirus Makers y diseñaron en pocas horas el prototipo de un respirador. Los planos del Insuflador Automático Nacional (IAN) serán subidos a una página web para que cualquiera pueda descargarlos y fabricarlos.
“Se trata del automatizador de una bolsa de respiración para que evitar que haya una persona asistiendo y bombeando constantemente”, especificó Alejandro Madeo, uno de los ingenieros electrónicos de MC Tecnologías.
Explicó que actualmente los bomberos, las ambulancias, las grandes empresas e incluso los gimnasios cuentan con las bolsas respiratorias. “Es un equipo de medicina que ya existe y respeta ciertas normas pero requiere de un humano. Este proyecto lo que hace es automatizar las bolsas”, añadió.
El insuflador podría emplearse en los casos en que el paciente requiera de un respirador automático. El diseño made in Bariloche es sumamente simple para facilitar su fabricación. “Es una estructura de fibrofácil que dispone de un motor que mueve un brazo hacia arriba y abajo y va bombeando la bolsa”, resumió Madeo.
Admitió que en España surgió un proyecto similar. “Todo es muy nuevo y no hay tanta información. Hay mucha gente trabajando en todo el mundo para tratar de resolver problemas vinculados a la pandemia”, detalló.
La idea de los jóvenes ingenieros nació en un grupo de Whatsapp de la promoción 2007 de la Escuela Cooperativa Técnica Los Andes. “De inmediato nos dispusimos a diseñarlo. La idea es subir los planos a la web para que cualquiera pueda descargarlo y fabricarlo”, recalcaron.
A lo largo del proyecto, los jóvenes contactaron a algunos médicos para recibir aportes y opinaran sobre la conveniencia del aparato. “Nos dijeron que el proyecto serviría. Obviamente no es lo ideal. Lo mejor es un respirador complejo pero hay pocos y esto permitiría descongestionar llegado el caso de que haya muchos pacientes internados por el virus”, plantearon.
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