Caso Rafael Nahuel: «Acá miraron muchos ojos», lanzó una testigo sobre las tres pericias balísticas
En la causa hay pericias contradictorias lo que sembró dudas sobre quién de los albatros mató a Nahuel. "No hay tiradores por fuera de las fuerzas de seguridad", ratificó una testigo y se confirmó la posibilidad de la "transferencia" de residuos de pólvora por contacto.
La perito Silvia Bufarini, declara en el juicio por el crimen de Rafael Nahuel. Foto captura video.
«Las pericias que se cotejan con el ojo humano, depende del ojo que lo vea. Acá miraron muchos ojos», dijo Silvia Bufalini, licenciada en Criminalística quien participó de la primera pericia balística en el cotejo del proyectil extraído del cuerpo de Nahuel, en Río Negro.
Con esa declaración, la especialista en balística resumió uno de los puntos que quedaron sobre la sala de audiencias en la octava jornada del juicio. Este miércoles declararon cuatro peritos armeros que participaron en las tres pericias realizadas sobre el proyectil homicida, en todo el país.
En Río Negro, Buenos Aires (Gendarmería) y finalmente en Salta (Ministerio Público), se llevaron adelante pericias con el mismo proyectil, todas con resultados distintos y divergencias en los procedimientos, que terminaron sembrando dudas sobre cuál fue el arma de donde salió el disparo mortal, es decir, quién fue el tirador.
En la primera pericia, realizada en enero de 2018, Negris, Uribe y Bufalini habían individualizado al tirador, al homicida, su arma, pero eso luego se puso en cuestión.
“Estábamos todos de acuerdo en la coincidencia”, reafirmó la licenciada recordando aquel enero de 2018 cuando se hizo el primer peritaje del proyectil y las armas de Prefectura que llevaron adelante en Bariloche. Era el “Arma B”, relató sobre el trabajo que hizo con Roberto Nigris y Karina Uribe, quienes declararon ayer.
Cómo fue la cadena de custodia de ese proyectil también fue foco de los interrogatorios de todas las partes. “Lo primero que se fijan los peritos es que la cadena de custodia este como corresponde (…) Nosotros recibimos el proyectil con el sobre con las firmas y la cadena de custodia”, respondió Bufalini.
Declaró hoy también el testigo Martín Moreno, perito balístico de Gendarmería, junto a su par la perito María Silvina Lastreti, de la misma fuerza, quien llevó adelante la segunda pericia del proyectil que mató a Nahuel en Buenos Aires y que arrojó la conclusión de que el arma que había sido detectada como homicida, no había sido.
“Las diferencias pueden tener que ver con el entrenamiento de quien mira. (…) No hay una forma única de hacer el cotejo”, respondió Lastreti consultada el porqué de las diferencias entre sus conclusiones y las de la primera pericia oficial. Del mismo modo, Moreno señaló que las diferencias en el resultado pueden deberse a “la experiencia del perito”.
La mirada, el enfoque, lo subjetivo; parecieran haber influido en un resultado sumamente importante en la causa, que terminan atribuyendo un sesgo de relatividad a las conclusiones porque terminaron siendo todas divergentes, en el marco de un procedimiento científico similar.
También declaró este mediodía el perito de parte Jorge Norberto Delgado, testigo de la defensa quien participó de la pericia en Buenos Aires. En ese momento trabajaba en Prefectura Naval Argentina.
«No hay tiradores por fuera de las fuerzas de seguridad»
«Según el peritaje de las armas, no hay tiradores ajenos a las fuerzas de seguridad», fue una de las conclusiones a las que terminó llegando en su declaración la perito Bufalini, tras la pregunta del fiscal Rafael Velhis Ruiz, ya que todos los indicios balísticos 9mm pertenecían a la Prefectura. No se encontraron más.
El defensor Marcelo Rochetti le consultó porqué no siguieron buscando más tiempo, a lo que la testigo respondió que no dependía del tiempo sino de las caracteristicas hostiles del terreno. «Quizás había más vainas en el precipicio de al lado, pero la verdad es que nadie quería arrojarse por el precipicio», expresó.
Una lanza de confección artesanal fue hallada más arriba en la montaña, a 1.200 metros de altura desde la entrada, allí donde no había indicios de disparos. “Se tomaron muestras y dio negativo. No tenia aspecto de (arma) ofensiva, sino mas de tipo ritual”, dijo Bufalini.
Los prefectos dispararon en desplazamiento
Para Bufalini, la ubicación y distribución de las vainas servidas en el contexto del terreno y sus características, indican que hubo un “desplazamiento” por parte de los tiradores, es decir, que cada uno de los 31 restos de disparos recolectados como evidencia, demuestran que se movieron gatillando esos 100 metros.
Sobre la inspección ocular el 7 de diciembre en el lugar de los hechos, la testigo ratificó conclusiones vertidas ayer por los peritos Nigris y Uribe, sobre las vainas servidas 9 milímetros y cartucho hallados en una superficie de 100 metros montaña arriba, a unos 1.000 metros de la entrada al predio. Todas las vainas salieron de las armas letales de los prefectos tras el cotejo.
Contaminación y residuos de pólvora
Bufalini fue ampliamente consultada por los test de residuos de pólvora, en este caso, por los que se les realizaron a Nahuel, Gonzalez y Jones Huala, estos últimos fueron los jovenes que bajaron a la víctima de la montaña.
Esas muestras en las manos de los tres habían arrojado resultados positivos, pero desde la querella la hipótesis es de “transferencia de residuos”, idea que hoy fue reforzada como una posibilidad real, tras el interrogatorio a la especialista.
“Existe la contaminación por transferencia (…) Si uno tiene restos metálicos puede transferir (por las manos) a otra persona”, explicó la perito y dijo que también puede ser por el ambiente, ropa y hasta superficies de un vehiculo pueden tener residuos de polvora.
Si hay muchos disparos “el ambiente se puede contaminar. Los gases no los controla nadie”, dijo y hasta puede suceder en un lugar al aire libre, explicó. Quien recibe un disparo puede tener restos de fulminante e incluso los hay en los móviles policiales, chalecos y esposas, son lugares potencialmente contaminados.
De todos modos, Bufalini explicó que la prueba de GSR es orientativa. “La lectura (de los resultados) tiene que ser en el contexto del escenario, no se la puede descontextualizar sino la lectura es orientativa», declaró.
Se termina la ronda de peritos
Para el próximo martes 12 y miércoles 13 de septiembre se espera que terminen de declarar los testigos de la parte pericial y se avance a mediados de septiembre con otra clase de testigos.
El martes será el turno de cuatro peritos balísticos que participaron de el procedimiento en Salta: Barboza, Hugo Flores Solis, Martin Spotorno y Agustina Oberti. El miércoles en tanto, hablarán quienes hicieron las pericias químicas fulminantes. José Luis Manzano, Fernanda Martin Baez, Daniel Alejandro Converso y Adriana Cerquis.
Cinco imputados
Los imputados son cinco suboficiales de Prefectura Naval Argentina por homicidio agravado aquel 25 de noviembre de 2017, quienes están presentes vía Zoom desde sus lugares de origen. Sergio Guillermo Cavia, Juan Obregón, Sergio García, Carlos Sosa y Francisco Javier Pintos, pertenecen al grupo de elite, Albatros.
El debate oral y público por el crimen por el que perdió la vida el joven mapuche de 22 años se sigue en Roca, a 500 kilómetros del lugar donde pasó. Es la tercera semana consecutiva de audiencias con movilizaciones en pedido de justicia por el joven mapuche puertas afuera.
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