Colicheo lloró ante el tribunal popular que lo juzga por el femicidio de Claudia Casmuz en Roca

"Nadie sabe quien apretó el gatillo", dijo el defensor y que no hay pruebas para incriminarlo por el asesinato. La fiscalía pidió a los doce jueces populares que no "desamparen" a la víctima. Es el segundo juicio por jurados en Roca.

“Les voy a pedir que no desamparen ustedes también a Claudia, que no hagan oídos sordos a sus gritos de justicia”, lanzó la fiscal Verónica Villarruel en su alegato de apertura en la primera audiencia del juicio por jurados este martes. “No hay dudas” de que Colicheo fue el autor del crimen, dijo. 

A metros de distancia y con su vestimenta característica, boina y bombacha de campo, el imputado Antonio Gregorio Colicheo se sentó por primera vez en la sala, luego de participar de manera remota en el juicio por Javier Videla, el trabajador judicial asesinado en Roca por el que fue condenado a 24 años de prisión.

Entre lágrimas, Colicheo habló de su historia de vida y de sus penas ante el jurado popular; pero no negó ni afirmó haber matado a la joven. No se refirió a la acusación. Su abogado, el defensor público Pablo Piombo, si lo hizo y dijo que no hay pruebas para incriminarlo como autor del crimen. 

Colicheo junto a su abogado defensor Pablo Piombo. Foto: Cesar Izza

Lo cierto es que es el único sospechoso por el asesinato de Claudia Casmuz, la joven de 28 años de Roca quien fue asesinada violentamente mediante dos disparos y un golpe contundente en la cabeza. Su cuerpo apareció enterrado el 4 de marzo del año pasado en el campo “La Perseverancia” a 75 kilómetros de la ciudad, a pocos días de que desapareciera el empleado judicial. 

Hoy, 18 meses después del femicidio, el único imputado empieza a ser juzgado mediante un juicio por jurados, el segundo en esta circunscripción judicial. Doce ciudadanos ofician de jueces para dar sentencia ante un caso de violencia de género extrema que podría tener una condena de prisión perpetua. 

Muy cerca, la madre de la joven espera justicia por su hija. Es Edith Yanca quien hace algunos meses decidió tomar el caso por las riendas y constituirse como querellante en la causa. Estuvo acompañada por el abogado Marcelo Hertsriken Velasco y Joaquín Catena. 

El tribunal popular, compuesto en igual medida por varones y mujeres de distintas edades, escuchó atentamente a las partes y los testigos que declararon en la primera audiencia. Al finalizar el juicio oral y público, estas personas serán las encargadas de decidir si Antonio Gregorio Colicheo es culpable o no del femicidio de Claudia Alejandra Casmuz

“El desamparo mata” 


Para el Ministerio Público, no hay dudas de que fue Antonio Colicheo quién mató a Claudia. Lo hizo con un arma de fuego en el puesto en cercanías a Casa de Piedra. Primero le habría disparado en el hombro y como ella intentó huir, la alcanzó y la golpeó fuertemente en el rostro.

El alegato de la Fiscalía en el juicio por el femicidio de Claudia Casmuz. Foto: Cesar Izza

 “Luego, con el arma de fuego le efectuó un disparo en la cabeza que le provocó la muerte”, sentenció. Más tarde cavó una fosa y la enterró entre matorrales. Según la fiscal, acompañada por el fiscal jefe Andrés Nelli, la pistola había sido robada a su tío, un policía de Neuquén retirado, quien prestó declaración en esta primera audiencia

“No es solamente la muerte de una mujer en manos de un hombre. Colicheo mató a Claudia aprovechándose de la fuerza física y de su vulnerabilidad. Claudia tenía padecimientos psicológicos”, alegó Villarruel ante el jurado. 

Edith Yanca, la madre de la víctima y querellante en la causa. Foto: Cesar Izza

Villarruel hizo un punto aparte sobre la situación de vulnerabilidad de la víctima quien vivía en situación de calle, con consumo de drogas y la prostitución como medio de subsistencia. “Nadie la buscó. Solo se la encontró”, lanzó Villaroel. 

“Gregorio Antonio Colicheo es la persona que mató a Claudia Casmuz. La llevó a un lugar alejado de la ciudad y la sometió con un arma de fuego. Le disparó y la golpeó”, sostuvo en su alegato el abogado querellante Joaquín Catena, quien representa a la madre de la víctima, Edith Yanca.   

“Nadie sabe quién apretó el gatillo”


El contrapunto surgió con el alegato del defensor, Piombo, quien le habló a los jueces populares y les pidió que “no se dejen engañar” por planteos emotivos y que no lo declaren culpable por ninguno de los delitos.

“Nadie sabe quién apretó el gatillo”, lanzó. La estrategia del defensor fue plantear que se trata de una causa en la que intencionadamente se estaría inculpando a su defendido y sin pruebas. “Los van a querer impresionar con las imágenes. No se dejen engañar ni manipular. Las imágenes prueban la muerte, pero no quien”, les dijo a los doce jueces y planteó que hubo irregularidades en la investigación.  

Foto: Cesar Izza

No está en duda que la mataron y que fue horriblemente, lo que está en duda es quién fue”, lanzó. “Tratan de apelar a la parte emocional y es porque faltan pruebas. Acá hay que juzgar en base a pruebas”, criticó a la fiscalía. 

Además, Piombo dijo que Colicheo ya estará preso hasta los 56 años porque tiene 32 y lo condenaron a 24 años por el crimen de Videla; y que su tío (Claudio Aroca) quien lo denunció por el robo del arma, tendría una saña particular con él. 

Por último, dijo que para que haya “femicidio” primero tendría que haber un vínculo entre los dos al igual que una relación asimétrica, y eso no correspondería en este caso según postuló.

Testimonios


Luego de los alegatos de las partes, fue el turno de los testigos. El primero en pasar ante el jurado fue Claudio Aroca, el tío de Colicheo y dueño del arma de fuego marca Taurus calibre 9 mm, computadora y placa de policía robadas. 

Aroca respondió preguntas de las partes y contó cómo descubrió que su sobrino le había robado. “El robo quedó registrado en las cámaras de seguridad (…) Me amenazó de muerte que me iba a cortar el cogote», dijo. En la audiencia reconoció su propia arma y su placa. Por otro lado, contó que el día del hallazgo del cuerpo de Casmuz, fue al campo “a verificar” si su arma estaba implicada en el suceso. 

Foto: Cesar Izza

Luego, pasaron otros testigos, mayoritariamente policías que participaron de los allanamientos por el robo del arma. Las audiencias continuarán durante toda la semana hasta el miércoles que viene inclusive, día en que serán los alegatos de clausura. 

La tarea de los jurados populares llega hasta el veredicto de culpabilidad, pero no serán parte del debate por el monto de la pena que le corresponderá a Colicheo en caso de ser hallado responsable.


Adherido a los criterios de
Journalism Trust Initiative
<span>Adherido a los criterios de <br><strong>Journalism Trust Initiative</strong></span>

Nuestras directrices editoriales

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios