Grooming y estafas, los delitos digitales que más crecen en Río Negro: la Justicia duplicó las pericias
El Poder Judicial de Río Negro duplicó las pericias de informática forense por delitos digitales como estafas, amenazas, extorsión y grooming. La comparativa es respecto a los casos investigados en 2023 y 2024.
La informática forense se volvió clave en las investigaciones de delitos digitales.
Las amenazas ya no llegan solo por teléfono ni las estafas se hacen cara a cara. En Río Negro, el delito encontró un nuevo escenario: el mundo digital. Esta nueva esfera, impulsó a la Justicia a adaptarse, afilar herramientas, sumar tecnología y saber leer un nuevo lenguaje. Así lo refleja el último informe del Poder Judicial provincial, que muestra un notable incremento de causas penales vinculadas al crimen digital.
Durante 2024, las prácticas de informática forense se duplicaron con respecto al año anterior, lo que demuestra que la evidencia digital se convirtió en pieza clave para esclarecer hechos. Estafas virtuales, amenazas en redes sociales, distribución no consentida de imágenes íntimas y grooming son los delitos que marcan esta nueva era judicial.
Informática forense: la clave en las investigaciones
En total, se realizaron 287 prácticas de informática forense, frente a las 132 de 2023. Casi la mitad fueron solicitadas por el fuero Penal, aunque también crecieron los requerimientos en los fueros Laboral, Civil y de Familia.
Estas pericias permiten analizar dispositivos como celulares, computadoras, redes sociales, correos y chats, para preservar y extraer evidencia digital. El rol del Cuerpo de Investigación Forense (CIF) es fundamental: se trata del equipo técnico especializado que traduce bytes en pruebas, que convierte una conversación de WhatsApp en un dato judicial irrefutable.
Del grooming a las estafas: los delitos más frecuentes
Entre los delitos más recurrentes aparece el grooming, el contacto digital de un adulto con un menor con fines de violencia sexual. Las causas por grooming exigen una respuesta integral: no solo el análisis técnico, sino también entrevistas protegidas y acompañamiento psicológico a las víctimas.
A esto se suman extorsiones, amenazas virtuales y estafas digitales, modalidades delictivas que en 2024 tuvieron un crecimiento sostenido. Los datos del informe revelan que las zonas de Roca y Cipolletti fueron las más afectadas por este tipo de delitos en la provincia.
Más causas, más audiencias y mayor complejidad
El fenómeno no es aislado. En todo el fuero Penal de Río Negro ingresaron 6.942 legajos judiciales en 2024, lo que implica un 19% más que el año anterior. A la par, se agendaron más de 16.000 audiencias penales, muchas de ellas con pruebas digitales como eje central.
Este aumento en la cantidad y complejidad de los casos empujó al Poder Judicial a reforzar los equipos interdisciplinarios. Psicólogos, psiquiatras, médicos forenses y especialistas en informática trabajan codo a codo para abordar delitos donde el daño, muchas veces, ocurre en el plano íntimo, invisible, virtual.
El rol del CIF y la cooperación interjurisdiccional
El CIF no solo actúa en causas penales. Sus equipos responden a todos los fueros judiciales y han sido solicitados incluso por otros poderes judiciales del país. Médicas, médicos forenses, peritos calígrafos, psicólogos y operadores digitales integran este cuerpo técnico que, en los últimos años, se convirtió en un eslabón vital de la maquinaria judicial.
A raíz del crecimiento de estos delitos y prácticas fraudulentas, la Justicia de Río Negro muestra como los crímenes se adaptan a los tiempos, y el Poder Judicial debe hacer su esfuerzo. Es que, en este proceso, el mundo digital ya tiene que verse como un terreno desconocido, sino que tiene que servir como motivación para investigar huellas digitales que dejan rastros en cada mensaje, clics e historiales, que pueden ser la prueba que defina el curso de una causa.
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