La alcaidía de Bariloche llegó a su punto límite de ocupación 31-07-03

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- La cárcel de encausados aloja desde hace más de dos semanas a 136 internos, el máximo de su capacidad, y ya no queda lugar para colocar siquiera un colchón en el piso Otros nueve presos están en las comisarías, y no saben dónde ubicar a los nuevos detenidos.

La demora en encontrar soluciones para la situación de la alcaidía provocó un nuevo colapso esta semana, dado que el detenido acusado de matar a un repartidor de la empresa «Paimún» permanece en el calabozo de la comisaría Segunda hasta tanto lo puedan ubicar en alguna celda.

Si bien el Servicio Penitenciario Federal permitió descomprimir la situación hace algunos meses, permitiendo el traslado de varios condenados a distintas cárceles federales, la restricción que excluye a los condenados a más de ocho años de prisión, a los presos por delitos sexuales y a los que reciben tratamiento psicológico o infeccioso, impide que la población de la alcaidía descienda a límites tolerables.

Tomando en cuenta que más de un tercio de los allí alojados han sido condenados o están imputados en delitos sexuales, y que hay condenados a cadena perpetua cumpliendo su pena en la alcaidía, es fácil imaginarse las dificultades que enfrentan las autoridades de la cárcel local.

Están próximas a su conclusión las obras encaradas para mejorar la situación de los alojados en el pabellón de autodisciplina, pero las mejoras no permitirán incrementar la capacidad de la alcaidía.

En realidad están encaminadas a transformar en medianamente dignas las condiciones de vida de los internos, los mismos que durante varios años permanecieron hacinados durante 22 horas por día, y gozaban de un recreo de 7 a 9, padeciendo temperaturas de congelamiento y careciendo de luz diurna la mayor parte del año.