La asistencia a empresas del Estado pasa los $1.000 millones

Estos fondos están destinados a la cobertura de desajustes de funcionamiento. Existen otros aportes para inversiones. Los mayores auxilios por déficit son para ARSA, Tren Patagónico y Canal 10. Aparece también la incierta Río Negro Compras.

El Estado rionegrino transfirió en el 2019 a sus empresas más de 1.000 millones de pesos para funcionamiento. Este año, según las proyecciones, superará los 1.300 millones. Hay otras asignaciones, pero relacionadas con inversiones por construcciones o maquinarias.

La provincia finiquitó estructuras societarias, como Sapse, pero suma otras, como Río Negro Tarjetas, pasando también por aquellas aún en proceso de revisión, como Hiparsa, con su permanente etapa de liquidación.

Actualmente, registra 13 empresas -incluyendo a Invap, con su particularidad- y la mayoría tienen transferencias del Estado provincial. Aún borroso en algunos casos, vale diferenciar aquellos envíos de capital. Queda en claro en Transcomahue con las partidas para construcciones del Plan Castello.

En cambio, hay cuatro sociedades con aportes para gastos corrientes -sueldos o mantenimiento, a partir de su marcado déficit en sus prestaciones. Así, Economía remitió 1041 millones en el 2019 y, en el primer semestre de este año, superó los 685 millones, con una proyección anual de unos 1.370 millones.

De las asistidas por sus desajustes, ARSA concentra mayormente esas transferencias, con la previsión que el Estado provincial remita 508 millones en el 2020. Esa sociedad mantiene un desequilibrio por atrasos en las tarifas de sus servicios. Por eso, esa estimación seguramente será insuficiente, como ya ocurrió en el 2019 que se requirió en diciembre un desembolso adicional de 55 millones de pesos.

El Tren Patagónico es la otra sociedad con fuerte desfinanciamiento. Los 312 millones programados para este año significa el 85% del presupuesto mientras que el resto de los recursos es por la venta de pasajes. Obviamente, la previsión de ingresos será inferior a la programada  ya que el servicio y la venta de pasajes lleva suspendido cinco meses.

La tercera sociedad con demanda de fondos públicos es el Canal 10. La asignación llega a los 179,4 millones, que representa un 66% de su totalidad presupuestaria. Casi el 88% de las remesas públicas están direccionadas a la cancelación de las obligaciones salariales.

Río Negro Compra es la nueva empresa y se programó una remesa de 59 millones para su puesta en marcha, focalizado en personal y servicios técnicos.

El Estado provincial cumple también con otras transferencias aunque están destinadas a “gastos de capital”, como construcciones y equipos. El año pasado, estas partidas llegaron a 1.780 millones, empujado por el Plan Castello. Por ejemplo, Transcomahue tiene asignaciones para el 2020  por 1.207 millones en construcciones.

Horizonte también se ha caracterizado por recibir capitalización del Estado provincial, que permitió mejorar su frágil situación patrimonial que era una objeción planteada por la Superintendencia de Seguros. La provincia inyectó capital en el 2019 -especialmente, bonos- que permitió su mejora técnica.

Invap figura entre las sociedades provinciales, pero su conformación, su autonomía y sus resultados otorgan una evaluación diferente. Hace un año, el gobierno también creó Río Negro Eólica, con participación de Invap y de Transcomahue, con el objetivo de la construcción de un parque  eólico en Cerro Policía.


La difusa empresa de tarjetas


Río Negro Compras, creada en el 2018, surgió para asignar tarjetas a los estatales. Hoy, su objeto es incierto y  está desdibujado en la gestión provincial. Aun así, su estructura en formación -según su último presupuesto- requiere casi 59 millones de pesos de fondos públicos.

Preveía iniciar sus actividades en abril, lo cual, no ocurrió.

Las erogaciones se direccionan a los gastos de funcionamiento, incluyendo un plantel de una veintena de integrantes, entre personal y contratos de servicios.

El Estado provincial pretende -según el plan inicial- participar  con una tarjeta en las compras de sus  70 mil estatales. Por lo pronto, su puesta en marcha está paralizado, salvo los habituales aportes públicos de la provincia.


Altec, con una salida por disputa de poder


Altec inició el año con un fuerte cambio: el paso de Economía a Gobierno, bajo  la órbita de la creada Agencia de Innovación, a cargo de Soledad Gonnet.

Sergio Baroni siguió en la conducción, pero enseguida aparecieron roces con Gonnet.

La funcionaria  llegó con la nueva gestión y Baroni venía con el equipo de Agustín Domingo. Incluso siguió cuando éste renunció, pero ya todo fue más complicado.  Con otra discusión con Gonnet, el ministro Rodrigo Buteler optó en junio por ella  y acordó con Baroni su salida. Sin reemplazo, la partida se formalizó y Gonnet asumirá provisoriamente, logrando el mando de Altec.

Baroni concretó importantes avances en  los sistemas de Recursos Humanos, pero no pudo con las falencias del servicio de Altec ni con esa discusión de poder.


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