La Catedral luce como nueva y se suma a los atractivos de Roca

Gentileza

El municipio invirtió 250.000 pesos en la remodelación.

ROCA (AR).- La remodelación de la Catedral Nuestra Señora del Carmen será presentada hoy a las 21, luego de la tradicional Misa de Gallo.

La inversión total para recuperar este histórico edificio roquense rondó los 250.000 pesos, según explicó ayer el secretario de Obras Públicas, César del Valle.

La obra, que generó expectativas por el despliegue de enormes maquinarias en pleno centro, tuvo como objetivos la reparación de los techos, que se encontraban sumamente deteriorados y provocaban reiteradas filtraciones y el reemplazo total de canaletas, que estaban destruidas por la gran cantidad de restos de paloma acumulando durante los últimos años. También se pintó el exterior, se instaló un nuevo sistema de iluminación y se cambiaron las baldosas de la escalera de acceso a la Catedral.

La Catedral lleva su nombre en honor a la Virgen del Carmen, patrona de Roca.

El edificio tiene una larga historia que arranca desde los orígenes mismos del pueblo. Su construcción llevó varios años y se fue habilitando paulatinamente. Era una obra importante y costosa para el poco dinero disponible.

La piedra fundamental fue colocada y bendecida el domingo 22 de octubre de 1950, y desde tiempo antes ya se estaban recolectando los fondos entre los vecinos para colaborar en su emplazamiento. Las donaciones se rendían prolijamente en notas publicadas en el periódico local y la motorizaban jóvenes de Acción Católica principalmente.

El proyecto y dirección técnica fue del ingeniero de Buenos Aires Guillermo L. Martín. La construcción estuvo a cargo de la empresa local Antonio Gattari e hijos. El mayor de ellos fue el que tuvo el control directo de los trabajos, que comenzaron a fines de 1951 con las fundaciones. Comprende una nave central con bóveda artesonada, dos naves laterales mayores y otras dos menores para altares laterales y confesionarios; crucero y amplio ábside. Se destaca la belleza de su estilo románico.

En diciembre de 1960 se habilitó la catedral en forma provisoria con las actividades parroquiales entre los andamios, y el Domingo de Ramos de 1964 (22 de marzo) tuvo lugar la habilitación definitiva.

Todavía con detalles en plena terminación, en julio de ese mismo año el obispo diocesano monseñor José Borgatti arribó desde Viedma y presidió los actos de las fiestas patronales, inaugurando un moderno reloj cuando dieron las 5 de la tarde del día 15. El reloj que vino por barco desde Baviera junto con el pesado campanario fue una donación de la feligresía católica de ese estado alemán por gestiones del vecino Carlos Spitzer.

Para la Navidad de 1977 la iglesia lució remodelada: nuevo altar, la incorporación de la talla en madera del Cristo Crucificado realizada por el escultor Juan Sánchez, iluminación y pintura de las naves y nueva iluminación exterior.

En febrero del 2004 y también usando una gigantesca grúa, la torre fue pintada, en ocasión de haberse arreglado el reloj, parado durante una década.

Hoy vuelve a lucir hermosa, como nueva, y es un sitio obligado no sólo para los feligreses roquenses sino para los turistas de paso que no pueden dejar de incluirla en sus recorridas por la ciudad.

(Fuente: Archivo de “Río Negro”)