La estrategia para evitar nuevas fallas en Planicie
Las autoridades consensuaron mantener la central en modo automático. Ante un nuevo desperfecto deberán generar energía con el turbinado en seco. Río Negro mantiene el amparo judicial ante un posible desabastecimiento del servicio.
Planicie Banderita es una de las presas del complejo Cerros Colorados.
Pasaron más de 45 días desde la reactivación de la central Planicie Banderita, del complejo hidroeléctrico Cerros Colorados. El 25 de noviembre, dos meses después de una falla que encendió la alarma en Río Negro, la empresa Orazul logró encausar la hidroeléctrica que es clave para el abastecimiento del riego de la zona productiva de Alto Valle.
La continuidad de la represa fuera de servicio podría haber afectado el abastecimiento en el consumo de muchas ciudades rionegrinas. Orazul aceptó la propuesta que hicieron tanto el Departamento de Aguas de Río Negro como la AIC (Autoridad Interjuridiccional de Cuencas) de trabajar con la central en modo automático.Es decir, evitar exigir demasiado a los transformadores para minimizar potenciales fallas.
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Una nueva salida del sistema obligaría a utilizar las turbinas en vacío para mantener los caudales requeridos para el riego. A su vez, Río Negro mantiene la medida judicial del amparo que se presentó en octubre por la turbiedad del agua y el posible desabastecimiento.
Dato
- 143 m³/s
- es el caudal actual del río Neuquén. Sin la central se necesitarían 48 m³/s para mantener los niveles.
“Por ahora viene funcionando bien, esperemos que siga todo igual. De cualquier forma la medida judicial se mantiene ante cualquier eventualidad”, detalló Fernando Curetti, superintendente del DPA.
Días previos a la puesta en marcha de la central, se realizó un prueba del turbinado en vacíos a cargo de profesionales de la Universidad de La Plata.
También estuvieron presentes representantes de la AIC. En ese sentido, Curetti indicó que todavía no recibió el informe con los resultados.De cualquier forma, explicó que ante una nueva falla es la única forma de mantener los niveles que necesita el río para garantizar el riego.
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“La erogación de agua a a través de las turbinas en vacío sería de 30 ó 40 metros cúbicos por segundo, muy por debajo de su potencia”. La complejidad que presenta esta modalidad es un posible daño de los equipos.
Sin el correcto funcionamiento de la central, la única forma de abastecer el sistema de riego es con las turbinas en seco”.
Fernando Curetti , Superintendente del DPA
La situación de riesgo se extiende hasta febrero. Hoy el caudal del río Neuquén está en el orden de los 143 metros cúbicos por segundo. Sin el funcionamiento de la central Planicie Banderita, se necesitarían unos 48 metros cúbicos por segundo que deberían aportarlo las turbinas en seco.
La de septiembre del año pasado no fue la única falla en Orazul. Esa situación obligó a conducir el caudal necesario por el tramo de río Neuquén entre Portezuelo Grande y el compensador El Chañar pero generó una turbiedad excesiva que llegó a ser diez veces mayor de lo normal generando mucha dificultad en los procesos de potabilización de agua para consumo humano.
El gobierno rionegrino había demandado a la operadora Duke en el 2016
No es la primera vez que el gobierno de Río Negro inicia una demanda judicial por una falla en Planicie Banderita.
En noviembre de 2016, por un desperfecto que sacó del servicio a la represa, el Ejecutivo provincial demandó a la firma Duke Energy que tenía la concesión del servicio, pero meses más tarde dejó sus activos en la región.
El problema que genera aguas abajo es el desabastecimiento de agua en la provincia y un riesgo sanitario para la población, tiene varios episodios en los últimos años.
Es que del río Neuquén se alimentan 60 mil hectáreas productivas del Alto Valle. Además del agua para consumo en varias localidades: Campo Grande, Cinco Saltos, Fernández Oro, Allen y sectores de General Roca y Cipolletti.
Planicie Banderita forma parte del complejo Cerros Colorados, constituido por otras cuatro presas Portezuelo Grande, Loma de la Lata, El Chañar y los embalses Mari Menuco, Los Barreales y El Chañar. Al pie del dique Planicie Banderita está emplazada la central hidroeléctrica homónima que cuenta con una capacidad instalada de 479 MW.
En ese momento la operadora era Duke que ya había vendido los activos que tenía en la región. Luego quedó en manos de Orazul que desde ese momento a la fecha registró cuatro fallas, dos de ellas durante el 2019.
En el último desperfecto, el gobierno rionegrino solicitó una profunda investigación para determinar si hubo negligencia del concesionario ante el evento de falla.
Recién dos meses después de su salida se pudo poner en funcionamiento gracias a dos transformadores, uno de ellos llegó de la central El Chocón.
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