La lucha contra el cambio climático se instaló en el Centro Cívico de Bariloche

El Centro Cívico fue el escenario donde un grupo de estudiantes de las Universidades Nacionales del Comahue y de Río Negro y de colegios secundarios se manifestaron ayer contra el cambio climático.

No hubo movilización como se había especulado. Algunos asistentes aprovecharon la oportunidad para informar a turistas y residentes sobre la separación en origen de los residuos, de técnicas para elaborar compost y sobre el perjuicio de artículos de plástico en el ambiente. Hasta miembros de una agrupación vegana adhirió a la manifestación que a nivel mundial convocó la activista ambiental sueca Greta Thunberg.

Abril Carrera, estudiante de la Licenciatura de Ciencias Biológicas, de la Uncoma, valoró la irrupción de la chica sueca para advertir a los líderes políticos del mundo “de lo que los científicos vienen alertando desde hace años”.

Sostuvo que en el país se habla todo el tiempo de otras prioridades y las políticas sobre el medio ambiente están postergadas para los gobernantes.

Ailín Clavería se acercó al Centro Cívico con un grupo de compañeras de la carrera de Ingeniería Ambiental de la Universidad Río Negro para informar sobre el proyecto “circuito verde”.

Dijo que empezó hace unos 3 años, pero luego se independizó y se unieron con estudiantes de la Universidad Nacional del Comahue y empezó otra etapa.

Dijo que iniciaron charlas en colegios primarios para difundir la temática de la separación de residuos y el compostaje.

Comentó que mostraron la realidad de Bariloche en las charlas a los chicos de primaria. “Creemos que el tema de los residuos es una problemática mundial”, enfatizó la estudiante de la Universidad de Río Negro.

“Creemos que compostando y separando es una forma de que esos residuos tengan utilidad”, afirmó Clavería. Destacó que la aparición de Greta generó un llamado fuerte de atención.

“Hay cosas que están sucediendo, cambios que son evidentes y que de alguna manera tenían que surgir y logró relevancia mundial”, opinó Ailín Peralta, estudiante de la Universidad de Río Negro.

Dijo que los pueblos originarios de latinoamérica luchan por preservar el medioambiente. “Surgió con ella (por Greta) pero podía haber surgido con otra persona”, sostuvo. Aunque admitió que se trata de un hecho interesante.

Clavería destacó que la chica sueca llamó la atención de gobernantes y empresas y eso generó un impacto mucho más grande.

En la manifestación hubo miembros de la organización “Por un Bariloche sin plásticos” y Manos Verdes.

Carrera informaba a las personas que se acercaban a la mesa donde había varios productos con un cartel que indicaba el tiempo estimado que demoraba en degradarse.

El ejemplo más dramático era un vaso de telgopor que lucía el mensaje: “nunca se degrada”. También, una pila con un cartel pequeño que enfatizaba que demoraba 1000 años o una botella de plástico de gaseosas que tarda entre 500 y 1000 años.

Carrera opinó que falta información en la población de Bariloche para entender el reclamo contra el cambio climático. Por eso, comentó que optaron por instalarse en el Centro Cívico para informar antes de que organizaran una marcha.

Valoró el mensaje de Greta que les dijo a los gobernantes del mundo “paren, los vamos a estar vigilando”. Opinó que la chica recibió críticas de varios sectores porque “es europea, blanca, de clase alta”, pero destacó que alce la voz y logre llamar la atención para advertir sobre las consecuencias del cambio climático.