La producción agropecuaria pierde fuerza en la economía de Río Negro

La economía rionegrina sufrió importantes modificaciones en este último tiempo. Uno de los puntos importantes es que el Producto Bruto Geográfico (PBG) creció en forma relativamente sostenida.

Cabe recordar que el PBG, es un indicador clave para medir el desempeño de las actividades, la tasa de crecimiento, su proyección, y un estimador del bienestar de la población.

El PBG de Río Negro ascendió en el año 2019 a 10,4 mil millones de pesos constantes, respecto al año 2004 representa un incremento del 68 %. Solo en 2014, 2016 y 2019 la economía finalizó con valores negativos, producto de las recesiones nacionales sufridas en esos años, según revela un reciente estudio elaborado por la Dirección de Estadísticas provincial.

La evaluación a valores constantes permite comparar los valores entre sí, evitando la influencia de las variaciones de precios relativos. Los valores de 2020 y 2021 no están disponibles, pero si lo estuvieran, también habría que mencionar que generarían una enorme distorsión producto de la crisis económica generada por la pandemia.

En este mismo período el país creció 40 puntos (140) en términos constantes respecto de 2004, unos 28 puntos por debajo de lo observado en Río Negro.

Por otra parte, el PBG per cápita rionegrino medido en moneda extranjera alcanzó en 2019 los 6.525 dólares. La cifra refleja un valor 80% superior al tomado como base de 2004 pero 35% inferior al de 2015.

Al analizar el incremento provincial registrado en la Provincia, claramente se observa que no fue homogéneo y en, algunas actividades, hasta retrocedieron sus indicadores durante este período.

Existen tres sectores definidos dentro del análisis del PBG rionegrino: el primario, que comprende aquellas actividades ligadas a la explotación y extracción de bienes naturales (Agricultura, ganadería, pesca y extracción de crudo y gas, entre otras); el secundario, que contempla a la industria manufacturera, la de electricidad, gas y agua, y la construcción; y el sector terciario, que concentra las actividades de transporte, servicios financieros, inmobiliarios, administración pública, comercio, servicios comunitarios, hotelería y restaurantes, enseñanza, servicios sociales y servicios de hogares privados.

-El sector primario fue el que menos crecimiento presentó. Los hizo a una tasa de solo el 9 % (en términos constantes) durante el período 2004-2019, unos 59 puntos por debajo del salto que reflejó la economía provincial (68 %) en ese mismo tiempo.

En 2004, este sector representaba el 22 % del PBG rionegrino cerrando el 2019 con una participación de tan solo el 14 %. Estos ocho puntos perdidos se concentran fundamentalmente en la caída del 29 % -en términos constantes- que reflejó el sistema frutícola, producto de la crisis estructural que atraviesa; y el moderado crecimiento del 18 % y 21 % registrado por la actividad ganadera e hidrocarburífera respectivamente.       

Tomando como base 100 el año 2004, la actividad agropecuaria en la provincia termina con un índice de 90 puntos en 2019 (10 % de caída), la pesca en 68 puntos (32 % de caída) y el sector hidrocarburífero en 121 puntos (suba del 21 %). Todos índices por debajo de la media provincial que se ubicó en 168 puntos.

¿Por qué se resintió tanto la actividad primaria? Sin lugar a duda, las políticas macroeconómicas aplicadas en el país en todo este último tiempo tuvieron efectos muy negativos sobre el campo, la pesca y los sectores ligados a la energía.

-El sector secundario por su parte mostró un crecimiento similar a la media provincial (64 %) durante el período 2014-2019. Paso de tener una participación del 15 % del total del PBG en 2004 al 14 % en 2019. 

El segmento que mostró la mejor performance fue la construcción que reflejó un crecimiento del 97 % en términos constantes tomando como base el año 2004, con una participación creciente del Estado que, en 2019, representó el 32% del total de lo construido en la Provincia.

El sector ligado a la industria manufacturera pegó un salto de 85 % mientras que el mercado de gas, electricidad y agua solo tuvo un moderado incremento de solo 12 puntos.

-El sector terciario fue el gran ganador. Corresponde principalmente a todos los rubros de servicios, creciendo 9 puntos en su participación sobre el total del PBG al pasar del 63 % en 2004 al 72 % en 2019. Este importante salto -en valores constantes, respecto al año 2004, representa un incremento del 89 %- estuvo liderando por la administración pública (ver más información en recuadro adjunto), transporte y comunicaciones y los servicios financieros.

La actividad que presentó el menor salto dentro de este sector fue la de los servicios en hogares privados mostrando un índice de 124 puntos tomados a valores constantes de 2004.

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Crece con fuerza la participación del Estado

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El rol del Estado en la economía rionegrina tiene una importante preponderancia en la economía regional hasta fines de la década del 70. Es a partir de este punto en donde se refleja un significativo crecimiento del sector privado dentro del PBG rionegrino, revirtiéndose nuevamente esta tendencia en 2002 hasta nuestros días.

Los modelos económicos aplicados en el país en estos últimos 70 años fueron clave para entender estos procesos cíclicos observados en la Provincia.

Un dato clave que puede argumentar el crecimiento del Estado dentro de la economía rionegrina se puede obtener analizando la evolución que ha tenido la rama de la actividad “Administración pública y defensa y seguridad social obligatoria” en estos últimos años, que tiene en cuenta entre sus principales indicadores al peso del gasto salarial en los tres niveles del Estado: nacional, provincial y municipal.

Fue la que más creció dentro de la economía local. En pesos constantes, respecto al año 2004, representó un incremento del 188% en 2019, índice que casi triplica el incremento del PBG rionegrino en este mismo período.

Pasó a tener una participación del 6% en el PBG provincial en 2004 al 11% al cierre del 2019. Este salto de 5 puntos porcentuales de la administración pública refleja el 60% del total crecimiento que tuvo el sector terciario (mencionado en la nota central) durante el lapso 2004-2019.

Los datos son impresionantes. La administración pública (concentrado esto solamente en gasto salarial) representa anualmente tres veces la riqueza que genera la agricultura y la ganadería en cada una de sus temporadas. O, dicho de otra forma, se necesitan tres años de producción de estos sectores del agro para poder abastecer la presión de los salarios estatales en Río Negro.

Entre 2020 y 2021 se registró un nuevo ingreso de empleados públicos a la planta permanente, una suba importante de salarios y la caída económica del sector privado por causa de la pandemia. En este contexto, es difícil que la participación de la administración pública dentro del PBG rionegrino no siga aumentando.

Complejo es poder construir una Provincia equitativa y desarrollada con este tipo de desvíos.