«Las callecitas de mi ciudad»

«Las callecitas de mi ciudad tienen ese no se qué» («Balada para un loco», de Piazzolla y Ferrer)… y un no sé cuánto en barrio Nuevo. Cuántas callecitas de media manzana, con nombres de pájaros, esos seres alados que nos llenan de alegría y emoción con sus trinos y gorjeos, que adornan las calles de este sector; ese conjunto de almas que tuvo crecimiento explosivo, con su palpitar de núcleo joven, entusiasta, trabajador, progresista, que fundó otro Roca dentro del mismo Roca, llevándose la gente hacia allá, bien al norte, arracimándose a las márgenes de la San Juan en una nomenclatura vistosa y atrayente.

Después está el acierto de homenajear a nuestra fauna alada, con la imposición de veinte nombres de ella, sin golpes bajos ni formalismos acartonados. Aquí hay autenticidad y buen gusto.

Adhiero a esta fiesta de calles con unos humildes versos (sin falsa modestia) que espero estén a la altura de la inteligencia de quienes impusieron esas denominaciones. Aquí están y dicen:

Yo significo el amor/ que se da en parejitas/ siempre llenas de candor/ pues somos Las Tortolitas.

Escudriño bien el río/ llevando sólo un proyecto/ soy la Garza y sólo ansío/ peces, crustáceos e insectos.

Pueblo casi el mundo entero/ mi pico es como un serrucho/ me llaman el Carpintero/ a cualquier palo «hago pucho».

Soy Cisne, todos me miran/ sin peligro a fe de erratas/ ni tampoco que se rían/ pues me paro en una pata.

Yo sería más que otario/ si a éste no le pongo un 10/ porque canta mi Canario/ mejor que Sandro, Cacho y Cortez.

De sur a norte del Ande/ lo han proclamado su rey/ el Cóndor su fama expande/ bien ganada en buena ley.

Una anilina no soy/ más bien pájaro pequeño:/ Colibrí, y adonde voy/ nunca, jamás tengo dueño.

El Pelícano es un ave/ exótico y de gran pico/ tiene plumaje muy suave/ aquí se lo certifico.

Voy libando las peonías/ las rosas, clavel de olor/ mi piquito es poesía/ porque soy el Picaflor.

Pechugón, siempre dispuesto/ a las jaulas adornar/ con copete rojo enhiesto/ por algo soy Cardenal.

Mi nombre es tan popular/ que hasta un médico lo tiene/ soy Churrinche y doy que hablar/ porque Huergo lo sostiene.

Estoy llena de misterio/ en mi graznido se nota/ esto se lo digo en serio/ por algo soy la Gaviota.

Veloz, de pico mortal/ soy Halcón el carroñero/ tuve hasta uso militar/ lo sabe eso el mundo entero.

Calandria: (como hasta grasa)/ imito todos los cantos/ pero no entro a su casa/ ser cautiva no lo aguanto.

Subo y bajo hasta mil veces/ salga bien o salga mal/ se me critica con creces/ Gorrión: objeto sexual.

Soy de gran envergadura/ a tierra sólo a empollar/ soy Albatro ¡qué hermosura!/ eso es lo que escucho hablar.

El Mirlo no es de estos lares/ pero lo tengo entendido/ que despeja sus pesares/ cantando con un chistido.

Yo soy una mezcla criolla/ y canto como el mejor/ soy Jilguero y sin bambolla/ con plumaje bicolor.

Soy la Cigüeña un ave/ que toda mamá ansía/ usted señora bien sabe:/ llego de noche o de día.

Los Palomares tuvieron/ en Juan Albretch gran cultor/ qué pena que ya se fueron/ dejándonos el dolor.

Avelino Noel Sierra, DNI 5.562.300

Roca


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