Más de 70 muertos por sismo en Irán

TEHERAN (DPA).- Al menos 70 personas murieron y más de 1.200 resultaron heridas por tres sismos consecutivos que sacudieron en la mañana de ayer la provincia de Lorestan, en el oeste de Irán, según informaron autoridades del país persa.

Los movimientos telúricos, con intensidades entre los 4,7 y 6 grados en la escala de Richter, sacudieron la ciudad de Dorud a las 04.47 hora local y pudieron ser sentidos también en la vecina provincia de Hamedan.

La mayor cantidad de víctimas se registró en las poblaciones cercanas a Dorud y Boruyered, donde las casas más precarias quedaron destruidas.

Unos 320 pueblos se vieron afectados por los sismos, 100 resultaron dañados gravemente y algunos quedaron completamente destruidos, informó el gobernador de la provincia, Mohseni Sani.

El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, emitió un comunicado en el cual llamó a la movilización de todas las fuerzas para ayudar a las víctimas de los sismos.

Funcionarios locales indicaron a la red de noticias Jabar que se estima que la cifra de muertos aumentará, ya que muchos pobladores aún podrían estar atrapados bajo las ruinas.

El ministro del Interior, Mostafa Pourmohammadi, en cambio, afirmó en una entrevista con la televisión estatal que la cifra de víctimas no subirá, ya que muchas personas salieron de sus casas cuando ocurrieron los dos primeros sismos menores y por lo tanto sobrevivieron al terremoto de 6 grados.

Se cree que entre las víctimas podría haber muchos turistas iraníes que pasaban en la zona la festividad del Año Nuevo Persa.

Equipos de rescate de distintas provincias fueron enviados a la región afectada, donde el suministro eléctrico y la red de telefonía se vieron interrumpidos, informaron las televisiones. Los hospitales de la provincia sacudida por los terremotos no tienen capacidad suficiente para acoger a todos los heridos, por lo que muchos ha tenido que ser enviados a centros fuera de la provincia, incluso a la capital Teherán, indicaron las autoridades.

Muchos habitantes de Dorud y Hamedan abandonaron sus casas y se han quedado en la calle por miedo a que se produzcan réplicas. En Boruyered, muchos residentes también tienen miedo de retornar a sus hogares y siguen en el exterior, principalmente en los parques.