Redefiniendo el lujo: más allá de lo material
Marcela García es experta en comunicación de marcas de lujo y directora de "Marce García & Co Luxury Consulting Agency". En esta columna exclusiva para Diario RÍO NEGRO, comparte su punto de vista sobre la evolución de este concepto.
Por Marcela García
Hablar de lujo es adentrarse en un territorio complejo y lleno de matices. El concepto se transforma con el tiempo y con la mirada de cada persona, y aunque solemos asociarlo de inmediato a objetos costosos o experiencias exclusivas, su verdadera esencia va mucho más allá.
Entonces, ¿a qué llamamos lujo, cada vez que, casi sin darnos cuenta, decimos “esto es un lujo”? Nos referimos a algo extraordinario que nos provoca una emoción, como un amanecer frente a un mar que nunca vimos, un objeto bello, una película que nos conmueve, un beso furtivo, un poema que nos toca el alma, un paisaje que nos deja sin aliento… porque es todo aquello que supera y se diferencia de lo habitual.
¿Cómo ha evolucionado el concepto de lujo a lo largo de la historia?: La reflexión de Marcela García
El lujo se trata de lo que es único y muchas veces irrepetible: la primera palabra pronunciada por un hijo, el último abrazo de alguien querido, la alegría de la primera cartera tan deseada y alcanzada gracias al primer sueldo. Instantes de vida que no pueden comprarse, experiencias marcadas a fuego en la memoria y en el corazón, que el tiempo no será capaz de borrar.
Y ya que mencionamos carteras, podemos hablar del otro lujo, del que sí se compra con dinero. Ese dinero que se convierte en valor, porque en el lujo el precio no es cuánto cuesta, sino el valor que representa. Valor medido por la exclusividad de un diseño único, por una tradición de manufactura artesanal que pasa de generación en generación, por el placer de una pieza fetiche que ingresa en la lista de los legados familiares a modo de herencia.
Fetiches si los hay, como la famosa cartera Chanel 2.55, la primera con manija de cadenas largas para colgarla desde el hombro y tener las manos libres. Bautizada 2.55 por haber sido creada por la propia Coco Chanel en febrero del año 1955, la cartera logra instalar también el matelassée, una técnica de cosido en forma de rombos que hoy es parte del ADN de la marca. Un clásico que superó el paso del tiempo y mantiene su vigencia intacta hasta nuestros días.
Recientemente, el 19 de agosto, se cumplieron 142 años del nacimiento de Gabrielle Chanel. La mujer que nos liberó de la opresión del corsé, que desestimó las faldas largas para montar a caballo y las reemplazó por los pantalones holgados que se quedarían para siempre en el guardarropa de todas.
Irreverencia, buen gusto, personalidad y una voluntad inquebrantable llevaron a una mujer de principios del Siglo XX a crear la fragancia más vendida de la historia, cuando eligió la muestra N°5, que el perfumista Ernst Beaux le entregó por encargo especial: un perfume de mujer que huela a mujer. Un legado, una historia emocionante y una definición del lujo casi perfecta: “lo opuesto al lujo no es la pobreza, es la vulgaridad”, sentencia Coco Chanel.
A partir de hoy, diario de Río Negro, lanza Moda y Belleza. El nuevo suplemento se pone a la moda con notas de servicio para el consumo, columna de opinión, además de información actualizada.
Por Marcela García
Registrate gratis
Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento
Suscribite por $1500 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora
Comentarios