Exigen datos sobre el ahorro económico de Gennuso en Bariloche

El gobierno elude informar cómo es el manejo de unos 3.000 millones de pesos de colocaciones financieras que tiene la Municipalidad y de los intereses.

Sin dar demasiados detalles, el Ejecutivo municipal de Bariloche se jacta desde hace un tiempo del ordenamiento económico alcanzado y del ahorro que logró acumular para enfrentar eventuales crisis e imprevistos, con la pandemia de 2020 como ejemplo más citado. El secretario de Hacienda, Diego Quintana, cifró esa reserva en 3.000 millones de pesos, lque pasó a ser un número emblemático para quienes critican el retaceo de inversiones en obras y en servicios.

Quintana pasó esta semana por el Concejo Municipal para exponer en la comisión de Economía los detalles del proyecto de presupuesto 2023. Habló de la suscripción de “plazos fijos”, pero a pesar de las preguntas aclaró muy poco sobre cómo se conformó el ahorro y cómo se maneja esa masa de dinero para evitar que se desbalorice.

Según la ejecución presupuestaria publicada en la web del municipio, hasta octubre los “intereses por colocaciones financieras” rindieron 951,2 millones de pesos. De modo que afin de año superarán holgadamente los 1.000 millones, cuando el presupuesto 2022 estimó ingresos por ese rubro de solo 564,4 millones de pesos.

La presidente del bloque del Frente de Todos en el Concejo, Julieta Wallace, formuló un pedido concreto a Quintana para que informe dónde está guardado ese excedente de dinero y cómo se decide cuál es la “colocación” más conveniente, pero la respuesta fue elusiva. “Por ahora no tenemos precisiones” dijo Wallace, y subrayó la “diferencia importante” entre lo presupuestado y la realidad.

“Quintana contestó muy por lo bajo, pero queremos el detalle, y la documetnación respaldatoria”, señaló la concejal. Su sospecha es que el gobierno conserva el abultado ahorro acumulado para aprovecharlo “en tiempo preelectoral”, cuando hoy ya existen necesidades a cubrir y demandas de todo tipo. Según Wallace, “deberían usarlo en tiempo y forma para resolver los problemas”.

Aseguró que en la reunión de comisión Quintana les dijo que de los 3.000 millones habría 1.200 comprometidos con “facturas de pago”, de modo que no estaría todo disponible. Cuestionó además que no haya una precisión sobre cuánto debe ser una reserva razonable para imprevistos en un municipio como Bariloche.

La concejal se quejó también de la dificultad para acceder a un desglose de la deuda municipal, que suma unos 900 millones de pesos. Dijo que sin esos datos no está dispuesta a votar de modo favorable el presupuesto 2023.

La conformación de un abultado ahorro de miles de millones de pesos también fue motivo de objeciones por parte de dirigentes sociales y barriales, que reclaman por obras de servicios, por la situación del vertedero de residuos y por soluciones urgentes a la demanda habitacional. En la última audiencia pública por el presupuesto el presidente de la junta vecinal de Nuestras Malvinas, Sergio Herrero, dijo que hay carencias irresueltas y ausencia de políticas. “Vemos que a la gente le faltan tierras, a pesar del dinero que tiene el municipio”, afirmó.


Ahorros para engrosar las arcas


Los intereses y colocaciones financieras pasaron a ser un rubro de fuerte peso en el cuadro general de ingresos del municipio, pero no siempre fue así. El rendimiento de los plazos fijos y otras inversiones (951,2 millones) representan en lo que va del año el 23,7% de los ingresos corrientes, cuando la previsión era mucho menor.

En años anteriores esa cuenta tenía una participación apenas simbólica y creció de manera exponencial. En 2018 el municipio cosechó con el interés devengado por sus ahorros apenas 12,9 millones e pesos, lo cual representó un 1,5% de los ingresos corrientes. En 2019 -el cuarto de la gestión Gennuso- ya se produjo un salto considerable y los rendimientos financieros pasaron a ser de 180,5 millones, un 13,8% de la masa total de ingresos.

En 2020 llegó la pandemia y el impacto se hizo notar. Los rendimientos financieros obtenidos por el municipio fueron de 85,3 millones en todo el año, con una participación del 6,7% en los ingresos corrientes. Pero el año pasado ya se recuperaron a 296 millones en total, lo que significó un 12,4% de los ingresos, proporción que casi se duplicó en 2022.

A modo de comparación sirve referir que este año, hasta octubre, los intereses bancarios para el municipio fueron una cifra equiparable a otras fuentes de ingresos que tradicionalmente son el principal sostén de la recaudación. Las rentas financieras aportaron 951,2 millones, mientras que la tasa de Servicios recaudó 1.224 millones, la tasa comercial 1.526 millones y la coparticipación 2,728 millones de pesos.


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