Natalia Oreiro trabaja el talento

Es una joven bonita, joven y seductora, joven y centro, joven y producida, joven y vendedora. Su imagen vuelve a pegarse a la música. Natalia Oreiro acaba de lanzar un disco con toda la pompa: "Tu veneno", un proyecto por el que se jugó entera y por el que dejó, pese a que la tentaron varias veces, la actuación por lo menos por un año. Ahora, sola, solita y sola, se lanza a difundirlo por Israel y algunos países de Europa del Este, donde es una número uno.

A los 15, Natalia Oreiro ya era Paquita de Xuxa y a los 16, con lo que ganaba filmando comerciales, comenzó a viajar desde Uruguay -su tierra- para hacer cástings a ver si entraba en alguna tira de la tele argentina. Lo logró en «Inconquistable corazón»; luego hizo un coprotagónico en «Dulce Ana», protagonizó «Modelos 90-60-90», «Ricos y Famosos», telenovela que también se está dando en un montón de países juntamente con «Muñeca Brava», la ultima que grabó.

Antes, filmó «Un Argentino en Nueva York» donde interpretó a Verónica, casualmente una chica que tenía una banda de música. Fue su lanzamiento como cantante. Grabó la canción «Que sí, que sí» y rápidamente ocupó primeros puestos de los ránkings radiales.

Pasó la prueba y BMG le propuso un disco con su nombre y apellido que alcanzó el oro y el platino en Rumania, Israel, Grecia, Rusia, Checoslovaquia, Croacia y Bosnia. Créase o no. Una mezcla de pop con algo de rock, hasta un blues, cuatro baladas y el energético «Gitano». «Mi familia, justifica Natalia, es casi toda de España y todo lo andaluz me tira muchísimo».

Su actual lanzamiento, «Tu veneno», es también una gran mixtura de estilos para atraer todos los mercados posibles.

Quería una tapa absolutamente diferente a la del primer compacto que fue muy romántica, imagen que tenía en ese momento, inclusive en la telenovela. «Y decidí -asegura- hacer algo más dark, un nuevo look oscuro, porque de alguna forma yo soy «Tu veneno». Tenía ganas de hacer un video donde se me viera por primera vez cantando con mi banda y mostrara un cómic contando la historia de la letra. O sea, yo hecha en dibujito -una cosa muy gótica- y lo conseguimos. Los directores fueron unos norteamericanos que entre otros tantos, realizaron un video de Björk».

«La idea del cambio es sorprender y enganchar al publico menor con los más grandes, por eso el escote y los dibujos. Lo fácil quizá, hubiese sido la continuidad, hacer algo igual al trabajo anterior. Pero, la vida está hecha de desafíos y consideré mucho más atrayente jugarme por lo que quería. Me pareció interesante y divertido ser una combinación de simpática con sexy».

Para Natalia «la imagen es importante. Igualmente creo que el talento es punto de partida. El talento se trabaja y uno crece. Es lo que estoy haciendo en este momento. Sé que tengo mucho por aprender. Sería muy aburrido si a los 23 años dijera ¡basta para mí! ¡Ya sé, ya aprendí todo!

«La imagen acompaña, porque a través de ella el público se identifica con el artista y si paga entrada para un espectáculo o prende la televisión no quiere verte como sos en casa. Yo no puedo ser monedita de oro y gustarle a todo el mundo».

«Mi intención jamás es parecerme a nadie; la gente se daría cuenta y seguiría a ese artista. Es cierto también que ya está todo inventado y hoy es muy difícil decir soy original».

Natalia cree que aunque no es fácil la vida de los actores, sobre todo en este momento, «quizás hubiese sido más entendible que continuara mi carrera de actriz después del éxito de «Muñeca brava», novela que se vendió a 30 ó 35 países».

Siente que «la décima parte de lo que me está sucediendo ya me parecería mágico. Es muy fuerte ir a Europa y que la gente cante tus canciones aunque no hable el mismo idioma, como me pasa en Checoslovaquia, Rumania, Grecia, Turquía, Israel o EE.UU. Es imposible describir lo que siento porque, si bien esperaba que funcionara en la Argentina y alrededores, las expectativas se superaron cuando otras culturas tan distintas se identificaron con mi música. A los latinos, triunfar nos cuesta mucho más que a los del norte».

– ¿Participaste en la elección de los temas, en la realización del video?

– «Es muy importante estar seguro y creer en lo que se hace, para no mentirse a sí mismo y posteriormente al público. Si fuera una persona a la cual todo el mundo le dice qué hacer, qué ponerse, qué cantar, cómo es el video, estaría mal porque yo soy el artista. Y por supuesto colaboré, me metí muchísimo en la elección de los temas; me juntaba casi a diario con los autores a quienes agradezco la paciencia y el haberme captado tan bien».

«Participé también con Fernando López Rossi en la autoría de «Basta de ti» y ayudé en la adaptación al español de «Estamos todos solos». Tenía muchas ganas de que fuera también un compacto extenso y tiene 15 canciones. En la época que vivimos, a la compañía y a mí nos pareció correcto grabar cuatro temas más de los habituales en un disco pop».

«En cuanto al video, quería que el primer corte fuera «Tu veneno» porque es un tema fuerte, sentía que Natalia (habla de ella misma en tercera persona) era «Tu veneno». Decidirlo llevó tiempo porque la compañía tenía que ver si convenía salir con él. Nos pusimos de acuerdo, les pareció bien y comencé a pensar en el guión».

«Aunque está inventado todo, igual buscaba algo original. Yo soy fanática de Los Ramones y ellos tienen un video con un cómic en el que van saltando de un cuadro a otro, entonces imaginé que se me viera cantando con mi banda».

«No sabés cuánto costó convencer a la compañía de que quería un video así, porque es bastante más caro, una animación lleva muchos meses de realización, muchos dibujantes. Pero los convencí».

Eduardo Rouillet

Presente y futuro

Natalia Oreiro tiene propuestas para dos películas en España pero no irá porque antes le gustaría retornar a su carrera como actriz en la Argentina, y además porque este año lo dedicará a presentar «Tu veneno».

Integramente grabado, mezclado y masterizado en estudios de Argentina, Inglaterra, España y Estados Unidos, el disco cuenta con la participación de prestigiosos músicos que tocaron con Celine Dion, Michael Jackson, Gloria Estefan o Madonna, como el baterista Abraham Laboriel-hijo, la guitarra de Michael Landeau, Ed Calle en saxo, Alex Acuña en percusión y el grupo español Siempre Así. Y ella, solita su alma.

Esta semana parte de gira a Israel, donde ya le confirmaron que las entradas están agotadas y hubo que agregar una cuarta función; después va a Rumania donde tiene tres recitales. (E. R.)

«Prefiero equivocarme sola»

«Fue realmente una lucha no agresiva pero lucha sí: decir quiero esto, pero te conviene aquello… Lo que me conviene es hacer lo que quiero, lo que me hace feliz, y yo quiero hacer lo que la gente va a ver. Esto que en teoría era lo más jugado, también era más divertido. Y me puse la camiseta, como me la voy a seguir poniendo durante todo este año, el que viene, durante toda mi carrera y cuando vuelva a trabajar como actriz», confiesa Natalia Oreiro.

«Quizás, los que no me conocen profundamente, crean que hay cincuenta personas a mí alrededor diciéndome qué hacer. Tengo un grupo grande de gente muy inteligente y muy capaz, que colabora conmigo; todo el tiempo me aconseja y yo escucho. Pero siempre hago lo que me parece, porque prefiero equivocarme sola y no que otros se equivoquen por mí. Yo me preparé mucho, en particular mi voz con Gabriela Torres, una maestra a quien le agradezco mucho; ensayamos todos los días, aprendo nuevas técnicas. Sabemos que mucha gente es un producto, muchos pueden pensar que yo lo soy. Pero, estoy segura de mí y sé que trabajé para crecer».

Viendo su presente y su futuro Natalia cree que «la verdad es que sería muy triste mi vida si lo fundamental fuera mi carrera, me convertiría en una persona muy fría si sólo me interesara ser profesional. No soy para nada así, tengo sentimientos muy marcados, soy sensible y para mí el amor es muy importante. Sí es cierto que cuando uno tiene una carrera y quiere crecer, no dedica el mismo que cualquier otra persona al amor, pero cuando existe, todo se entiende. Además Pablo Echarri también trabaja mucho y le encanta lo que hago, o me miente muy bien…».

«Creo que no perdí espontaneidad, sí intimidad, yo amaba ir a parques de diversiones, a las ferias hippies y no lo puedo hacer; pero me hago cargo de eso porque elegí esta carrera y prefiero que la gente me reconozca, a pasar desapercibida porque no gusta lo que hago. Perdí también tiempo para estar con mi familia, mis amigos, mi novio. Pero, con 23 años puedo esperar para formar una familia y tener hijos; yo no descarto esa posibilidad pero todavía no es el momento».

(E. R.)

Qué pena me das

«Yo tenía ganas de cantar algo de Andrés Calamaro y al loco le pareció bárbaro y se descolgó con unos temas alucinantes. Hice «¡Qué pena me das!» el más roquerito de todos y me divirtió mucho, así que se lo agradezco. Me llenó de orgullo que confiara en mí como interprete de una de sus canciones».

Es uno de los temas de «Tu veneno» y cuenta su aburrimiento ante los estragos que ocurren en el mundo: gente que ensucia y mata, que mira para otro lado y no se detiene por nada, define Natalia Oreiro. «Me interesa mucho el medio ambiente y lo cuido».

«Vale pedir que el petróleo no contamine el agua, que no maten ballenas. Yo colaboro con muchas causas que no quiero hacer públicas, no necesito de una cámara para ayudar. Los jóvenes tienen más conciencia que muchos grandes porque nosotros vamos a sufrir con todas las cosas raras que están metiendo en la comida, por el problema solar, por todo lo que están destruyendo en el planeta». (E. R.)


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