«No hay retorno» para la fórmula Sobisch-Sapag

Lo dijo la senadora Luz Sapag. La hermana del vicegobernador opinó que "no puede repetirse".

Luz Sapag: «No coincido para nada con la decisión del gobernador de quitar la publicidad a «Río Negro».
NEUQUEN (ASM/AN).- La senadora Luz Sapag salió a poner el cuerpo y a respaldar a su hermano, Jorge Sapag, quien marcó profundas diferencias con el gobernador Jorge Sobisch que dejaron al borde del naufragio la sociedad que gobierna la provincia. «Esa fórmula no puede repetirse -dijo la senadora-. Creo que no hay retorno». De todos modos, dejó la última palabra en boca del vicegobernador.

Así, Luz Sapag se sumó a las críticas contra la conducción que lleva adelante el mandatario neuquino y profundizó la fisura que amenaza con una eclosión interna en el MPN.

Anteayer, el vicegobernador había cuestionado que «no era considerado» por parte del Ejecutivo provincial en determinaciones adoptadas por la actual administración. A modo de ejemplo mencionó la decisión de privar a «Río Negro» de la publicidad oficial.

La senadora también objetó esa sanción instrumentada desde el Poder Ejecutivo neuquino. «No coincido para nada con la decisión del gobernador -subrayó-. A mi me parece que tener una buena relación con los medios, las ONG»s, la Justicia y las comunidades mapuches es la base para ser gobernante y llevar un programa político».

El martes, el vicegobernador se quejó de que hay «decisiones» de las que «me entero por los diarios». Y planteó que las elecciones provinciales deben realizarle en setiembre u octubre en contradicción con la fecha anunciada por Sobisch, que quiere convocarlas en abril.

Las declaraciones de Sapag provocaron un silencio generalizado y dejaron perplejo al entorno del gobernador. Ayer este diario intentó obtener alguna opinión entre los diputados alineados con el mandatario neuquino y funcionarios del gabinete provincial, pero nadie se animó a replicar a Sapag.

De todos modos, una alta fuente partidaria evaluó que es inminente la convocatoria a internas para cubrir los cargos provinciales y pronosticó que «a Sapag no le dan los tiempos» si quiere competir con Sobisch. «Se complicó todo», fue la frase que utilizó para resumir el estado de animo del sobischismo.

En diálogo con la corresponsalía de «Río Negro» en San Martín, la senadora advirtió que «se están acentuando las diferencias entre Sobisch y mi hermano». «Encontramos que el gobernador se está alejando de los principios del MPN», agregó.

Opinó que «esa fórmula (por Sobisch-Sapag) no puede repetirse. Creo que no hay retorno. Pero ese es un tema de mi hermano y deberían preguntárselo a él». Y negó de plano acompañar al vicegobernador en una eventual puja electoral interna con el sobischismo.

Para la senadora «el modo inconsulto de generar propuestas como en su momento fueron la regionalización, la conformación de un partido nacional, el acercamiento con el partido de (Ricardo) López Murphy y la confrontación con las comunidades mapuches, que nos hizo perder el proyecto Araucaria y la falta de consulta a los órganos partidarios son algunas evidencias». En opinión de Sapag «son diferencias que se van sumando y en un momento hace que uno sienta que debe retornar a las fuentes y recrear los principios del partido».

Rescatan la actitud del titular de la Cámara

NEUQUEN (AN) – El arco opositor, incluidas voces disidentes del oficialismo, rescató actitud del vicegobernador Jorge Sapag, quien en declaraciones a medios periodísticos fustigó a Jorge Sobisch por haberlo dejado de lado en la toma de decisiones trascendente. Coinciden en que con sus dichos ha marcado una clara diferencia con el sesgo autoritario del jefe del Poder Ejecutivo.

El diputado aliancista Ricardo Villar le otorgó ayer una «superlativa significación» a la reacción de Jorge Sapag. Hizo extensivo el reconocimiento a algunos legisladores del oficialismo que se han resistido a ciertas directivas de Sobisch. «Ya no quedan dudas que el gobernador neuquino entró en una peligrosa dimensión del manejo del poder, en la cual se cree en las verdades absolutas, en la infalibilidad y, lógicamente, en la invencibilidad. De allí creerse dueño de vidas y bienes de sus súbditos hay un límite demasiado difuso», dijo Villar en un comunicado.

El oficialista Jorge Tobares opinó que las afirmaciones de Sapag «son muy duras y van a levantar más polvareda» en la intimidad del MPN». Evaluó que la «gota que desbordó el vaso» fue el desplante a Sapag de los diputados sobischistas en el marco de la reunión de conciliatoria a que llamó el TSJ para zanjar la parálisis de la Cámara. «El vicegobernador está poniendo de manifiesto elementos que atañen a la democracia del partido, en su reclamo de participación en las decisiones del gobierno», añadió.

Aldo Duzdevich (PJ) sostuvo que «sabía de esas disidencias» y opinó que «la maniobra de intentar nombrar a los vocales del TSJ no contó con el apoyo de Sapag».

Carlos Asaad, del menemismo, rescató la figura del vicegobernador «porque exhibe siempre una fuerte vocación al diálogo».

El martes, en Cipolletti, desconocidos ingresaron en el domicilio de Daniel Bonet, un estrecho colaborador de Jorge Sapag, redujeron a su hija y se llevaron una pequeña suma de dinero. Llamativamente dejaron otros elementos de valor. A finales del año pasado, fue robada la residencia oficial de Sapag y pocos días después ocurrió otro tanto con la casa de la senadora Luz Sapag, en San Martín de los Andes (ver página 30).


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