Nos vemos en el llano
Lanús perdió en la altura de Riobamba, por la mínima
Lanús dio un paso en falso, pero quedó la sensación de que tiene todas las chances de meterse en el cuadro principal de la Copa. Perdió 1-0 ante Olmedo, en Ecuador y el martes tratará de dar vuelta la historia.
En el balance de los 90 minutos jugados en la altura de Riobamba, el «granate» fue un poco más y debió llevarse al menos un punto. Pero no supo capitalizar sus oportunidades y cayó ante un rival más efectivo, que generó la diferencia a los 26 del complemento a través de Estuardo Quiñonez.
El once de Ramón Cabrero trató de aquietar el ritmo en la parte inicial, con el lógico objetivo de sufrir lo menos posible los efectos de jugar a 2.800 metros sobre el nivel del mar.
Y le salió bien ante un elenco rústico, que apostó a pelotazos largos que pocas veces llegaron a destino y a centros que en su mayoría no encontraron destinatario, más algún disparo de larga distancia que se perdió en un oscuro rincón del estadio Olímpico de Riobamba.
Lanús manejó los tiempos en esos 45 iniciales, pero nunca se decidió a presionar con ganas al endeble equipo ecuatoriano, para no fatigarse en la altura, como conformándose con el 0-0.
Estuvo cerca a los 20 a través de un tiro libre de Maxi Velázquez rechazado por Villafuerte y un minuto más tarde cuando Valeri desniveló por derecha y sacó un centro que Sand no pudo conectar por poco al ser anticipado por Caicedo.
El local fue más inofensivo. Apenas si llegó con un cabezazo de el argentino Antonelli que controló Bossio sin mayores problemas y otro de Perlaza que rechazó en el área chica Valeri.
Por eso el parcial se fue en blanco. Hasta ahí negocio para Lanús. Pero en el inicio del complemento, Olmedo empezó a apretar un poco más. Estuvo cerca en dos ocasiones, primero a través de un disparo de Antonelli que rechazó Bossio al córner y enseguida mediante un toque del mismo punta que rechazó Valeri, con Bossio vencido.
El «granate» recuperó el control y sobre los 12 un cabezazo de Quintana se fue apenas por encima del travesaño.
Parecía que nada se iba a modificar por la impericia de ambos. Hasta que a los 26 Quiñonez, quien había ingresado en el descanso, desbordó por derecha, enganchó hacia adentro y sacó un zurdazo a media altura que se metió cerca del palo derecho de Bossio.
Sobre el final Lanús tuvo una chance clara pero Lagos la desperdició al cabecear alto. El 1-0 terminó siendo un premio excesivo para el elenco ecuatoriano que llegará a la revancha con una leve ventaja. Pero el campeón argentino, en el llano, no debería tener problemas en revertir la serie.
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