Obra clave para el río Colorado comenzaría en abril
Se trata de la construcción de una planta de tratamiento de barros que garantizará una mejor calidad de agua para todas aquellas ciudades que toman el recurso de esta vía hídrica. Los trabajos comenzarían en abril de este año.
Las muestras se habían realizado en siete puntos estratégicos del río.
Luego de estudios realizados en el cauce del río Colorado y reclamos durante décadas al gobierno de La Pampa, finalmente la empresa Aguas del Colorado inició el concurso de precios para la construcción de una planta de tratamiento de barros en la potabilizadora (construida en 2005) que lleva agua para abastecer a más del 80% de la población pampeana. Esta última obra está construida en frente al paraje rionegrino de Pichi Mahuida.
La planta de tratamiento que se construirá fue aprobada por el Comité Interjurisdiccional del Río Colorado (Coirco) en septiembre de 2019, con un plazo de ejecución de 10 meses, estimándose su iniciación a mediados de abril del corriente año.
Cabe recordar que los últimos estudios realizados por técnicos del Coirco, el Departamento Provincial de Aguas (DPA) y del Centro de Investigación y Asistencia Técnica a la Industria (CIATI AC), solicitados por el gobierno de Río Colorado y Río Negro, arrojaron que la empresa pampeana vuelca todos los efluentes sin tratamiento al cauce del Colorado alterando la calidad del agua, con altos niveles de magnesio, aluminio y calcio.
Las muestras se habían realizado en siete puntos estratégicos, como aguas arriba del Cañadón donde funciona el acueducto que está ubicado a unos 80 kilómetros de la localidad de homónima Río Colorado.
Los análisis llegaron después de varios reclamos de esta comunidad por los constantes vuelcos de los efluentes generados por esa planta pampeana. Allí se demostraron las concentraciones constantes y similares de calcio y magnesio en el agua.
La obra largamente reclamada tiene por finalidad extraer el barro de las descargas de los desagües de la potabilización para no producir su vertido (como ocurre actualmente desde hace unos 15 años) al río Colorado comenzando a respetar las normativas provinciales de control de vertidos, en lo referente a los parámetros sólidos suspendidos y aluminio.
La nueva planta comenzaría a funcionar el próximo año y descargaría al río los efluentes tratados junto con los de bajo contenido de aluminio.
El destino final de los barros, que serán acumulados en bolsas, se ubicará en un área de acopio (técnica de Relleno Sanitario), lo que permitirá confinar y almacenar los barros en forma segura y posibilitar su uso en un proceso de reutilización.
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