Paren la contaminación del Nahuel Huapi

Seguramente lean el título y recuerden la imagen del expresidente norteamericano Barack Obama visitando Bariloche en marzo 2016, navegando el Nahuel Huapi con grandes elogios a los paisajes argentinos. Y acto seguido, pensarán en la petición de Change.org con más de 30.000 firmas pidiendo que las autoridades nacionales se hagan cargo de las obras necesarias para proteger ese mismo lago.

Lo cierto es que se está pidiendo algo que hemos puesto en marcha y estamos finalizando.

La realidad superó a las redes: en agosto 2019 se inaugurará la nueva planta de depuradora de Bariloche que estamos haciendo para sanear el lago Nahuel Huapi y el próximo 13 de marzo vamos a abrir los sobres con las nuevas ofertas para la obra del colector costero.

Además, terminamos las obras complementarias y ya está funcionando la planta de tratamiento de camiones atmosféricos que mejora el sistema cloacal de la ciudad.

Creo en la gestión y en la nueva forma de hacer política, escuchando a los argentinos y entendiendo cuáles son sus necesidades.

Obras claves

 Estamos hablando de obras claves para el sur de la Argentina: la nueva planta depuradora y el nuevo colector costanero duplicarán el saneamiento, garantizando un servicio para 190.000 habitantes por los próximos 20 años.

El primer paso para el desarrollo sostenible de nuestro país es garantizar los servicios básicos que hacen a la calidad de vida de los argentinos y crear la infraestructura necesaria para impedir la contaminación de nuestros recursos naturales y nuestras reservas de agua. En ese sentido, hoy estamos transitando una etapa histórica en el marco del Plan Nacional de Agua.

Con más de 40 plantas de tratamiento en construcción, de las cuales ya hemos terminado 16, estamos duplicando la capacidad que tenía nuestro país hacia diciembre de 2015, cuando nos encontramos que se trataban menos del 20% de los líquidos cloacales, muy por detrás de nuestros vecinos en la región. La buena noticia es que, a fines del 2019, se tratará el 40%.

Muchas de las obras que estamos haciendo afectan directamente al norte de la Patagonia, y específicamente a las provincias de Río Negro y Neuquén. Terminamos la ampliación de la Planta Tronador, en Neuquén capital, que garantiza una mejor calidad de vida para 360 mil vecinos. Además, estamos construyendo el Colector Oeste para garantizar el servicio en toda la zona oeste de la capital, que se va a vincular con esa planta terminada.

En la Provincia de Neuquén también estamos terminando la planta de tratamiento de Senillosa y la nueva planta de Villa La Angostura, esta última muy importante porque la localidad no contaba con ninguna planta depuradora y ha tenido un crecimiento poblacional muy importante.

Impacto negativo

La falta de infraestructura y la ausencia de capacidad de tratamiento anterior comprometían y contaminaban el Lago Nahuel Huapi, con un impacto negativo tanto ambiental como turístico. Inauguramos, también, la nueva planta de agua potable de Cinco Saltos, que llevó una inversión de 467 millones de pesos y mejorará la calidad de vida de más de 30 mil vecinos.

Podríamos preguntarnos por qué estas obras no se habían hecho hasta el momento. Son obras que no se ven: no tienen rédito político, requieren inversiones importantes y generalmente por sus plazos de construcción muchas veces terminan siendo inauguradas en otros gobiernos. Por eso no han sido priorizadas.

Pero eso lo dejamos atrás, estamos transitando un cambio en la forma de hacer política. Revertimos esos criterios y volvimos a priorizar cuestiones de fondo, como la inversión, la transparencia y la resolución de los problemas concretos y cotidianos de los argentinos como por ejemplo: abrir una canilla en el hogar y recibir agua potable. Y lo más importante es que lo estamos haciendo desde la planificación y con una visión a largo plazo.  

Es muy importante seguir por este camino y que los gobiernos provinciales tomen progresivamente más protagonismo.

 Que podamos impulsar entre todos las soluciones necesarias para un verdadero desarrollo económico sostenible.

Con más calidad de vida, salud pública y confianza que aliente la inversión privada y el desarrollo de nuestro principal capital que es la creatividad humana y la innovación. Todos sabemos de esa enorme capacidad que tiene la Argentina, sigamos trabajando juntos para hacerla realidad.