Producto de qué es esa situación

«Muchas veces un episodio de agresión (como el de la escuela 32 de Roca) no es producto de un momento único sino que puede ser la culminación de una serie de situaciones que son co-construidas tanto por padres como por la escuela. (Salvo que estemos ante un caso de una patología). Con esto queremos significar que hay que efectuar un profundo análisis de cómo se llegó a esa situación en cada caso y la responsabilidad de padres, docentes, directivos en la misma. No hablamos de culpabilidad, sino qué se aportó desde la institución para llegar a ese episodio de agresión», expresó Daniel Martínez Zampa, abogado, mediador y magister en administración y resolución de conflictos.

«De lo que he visto, la escuela en muchas ocasiones contribuye al círculo de la agresión, aunque más no sea no dando respuestas al alumno o al padre a una inquietud, un pedido no satisfecho (como puede ser la explicación de una nota) puede ser el inicio de una escalada del tema, y un trabajo a tiempo podría cortar este círculo», afirma Zampa. «Es esencial la autoevaluación docente como paso previo a trabajar en la gestión de los conflictos; otro trabajo paralelo es buscarle una explicación a la impunidad que lleva a los padres a trompear a un maestro: con esta base se puede iniciar un delicado trabajo».


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