“Quedate en el auto, yo resuelvo esto”

NEUQUÉN (AN).- Por el crimen del penitenciario Lucas Ibáñez declaró como testigo la mujer que lo acompañaba en el auto cuando el policía Antolín Cerda le disparó 14 tiros. Se trata del homicidio de la noche del 29 de junio en calle Fotheringham al 600, donde un efectivo de la Comisaría Segunda ejecutó a un penitenciario de la Unidad 11 por estar en el auto con su expareja. La mujer aclaró el tipo de vínculos que la unían a los hombres y brindó detalles de los momentos previos al crimen. Dejó claro que con Cerda tiene un hijo de 4 años y que la relación había tenido un paréntesis en los últimos dos meses. Ella había comenzado a salir con Ibáñez, amigo de la infancia de Cerda. Los tres son oriundos de la localidad Las Lajas, ubicada a unos 250 kilómetros de la capital neuquina. Cerda e Ibáñez se criaron juntos en el paraje Las Buitreras. “Días antes del crimen la relación entre Ibáñez y la mujer había terminado. Esa noche se juntaron porque él le había pedido una charla de cierre de la relación”, confió una fuente del caso. Después de la charla Ibáñez llevó en su auto a la mujer hasta la casa de una hija, ubicada cerca del lugar donde ocurrió el sangriento desenlace de la historia. Por allí la mujer pensaba pasar a buscar a su hijo menor para luego irse al inquilinato que queda a una cuadra y media de lugar del crimen. En su paso por el centro neuquino el policía Cerda los vio pasar en el auto, se tomó un taxi y los siguió. “La relación con el policía estaba ya encaminada, por eso cuando lo vieron bajarse del taxi y encarar para la ventanilla de Ibáñez la mujer le dijo al penitenciario ‘Quedate adentro del auto que yo resuelvo esto’, pero no alcanzó a llegar al otro lado del auto que Cerda abrió fuego”, detalló una fuente de la causa. El juez Marcelo Benavídez tiene diez días hábiles para resolver la situación procesal del policía, quien permanece detenido.