Retazos de la Boca en el MNBA

NEUQUÉN (AN).- Para esos días de agobiante calor que ya adelantan los meteorólogos para este verano, la sede neuquina del Museo Nacional de Bellas Artes está preparando una muy buena opción. A partir de febrero y hasta principios de abril, se podrá disfrutar de las más significativas obras del «señor de La Boca», el inolvidable paisajista Benito Quinquela Martín.

La muestra denominada «Quinquela y sus contemporáneos», se inaugurará el 8 de febrero y reunirá treinta obras del pintor porteño y otras veinte de algunos de sus contemporáneos. Estarán presentes con sus cuadros, Fortunato Lacamera, Marcos Tiglio, Miguel Diomede, Miguel Carlos Victorica, Eugenio Daneri y Alfredo Lazzari, entre otros.

«La muestra es una producción conjunta entre el Museo Nacional de Bellas Artes de Neuquén y el Museo de Bellas Artes de La Boca. La intención es que el turismo

tenga un gran atractivo para visitar en la ciudad. Además, nos interesa que los chicos de las escuelas puedan tener contacto con uno de los pintores más característicos de la Argentina, por eso la exposición permanecerá hasta principios de abril», comentó el director de la sede neuquina del Museo Nacional de Bellas Artes, Oscar Smoljan.

Escenas del puerto

Benito Juan Quinquela Martín no solo fue y es uno de los artistas plásticos emblemáticos del arte argentino, sino también el creador de un estilo inconfundible. Se lo llama «el pintor del Riachuelo» por ser el primero en desarrollar su labor apuntando exclusivamente a temas de la zona. A lo largo de su producción, Quinquela reflejó escenas portuarias, los astilleros, las callecitas y personajes del barrio más porteño, del barrio donde pasó casi toda su vida, La Boca.

«Quinquela no sólo fue un referente, sino que creó un barrio, le dio todas las características, tuvo que ver con el sentido, es un artista cabal en función de la realidad social de un barrio que fue la puerta de entrada a la Argentina y

donde se desarrolló no sólo la plástica, sino también la poesía, el teatro, Si hay un emblema de ese tiempo es Quinquela Martín», consideró Smoljan.

Quinquela Martín nació en 1890, de pequeño fue dejando en la Casa de Expósitos. Casi ocho años después fue adoptado por el matrimonio de Manuel Chinchella y Justina Molina, quienes tenían una carbonería en La Boca. Benito cursó sólo los dos primeros grados de la escuela primaria y luego de dedicó a trabajar codo a codo con su padre.

A los 17 años comenzó a estudiar dibujo y pintura con el artista italiano Alfredo Lazzari, su único maestro. Quienes se dedicaron a estudiar la vida de este artistas boquense, sostienen que completó su formación autodidacta a través de lecturas en la biblioteca del Sindicato de Caldereros y allí descubrió el libro «El Arte», del escultor francés, Auguste Rondin, que lo impulsó a consagrar su vida a la creación artística.

Del francés tomó como leit motiv de su vida y obra, la enseñanza: «se debe reflejar únicamente la vida y el ambiente» y allí se encaminó a pintar su aldea, La Boca del Riachuelo.