Se tramita en Neuquén un expediente de la sucesión de Remus Tetu

NEUQUEN (AN)- La justicia civil neuquina abrió un expediente para tramitar la sucesión de un departamento que fue propiedad de Remus Tetu, ex interventor en la Universidad Nacional del Comahue y en la Universidad Nacional del Sur. Quienes fueron docentes en esa época lo recuerdan como uno de los períodos más oscuros, en el cual hubo exilios forzosos y asesinatos.

Remus Tetu, oriundo de Rumania, murió en noviembre del año pasado en Bucarest, la capital de ese país europeo. La noticia de su fallecimiento no tuvo difusión pública en Argentina hasta ahora, cuando se conoció que a través de un abogado se abrió un expediente sucesorio en Neuquén.

El expediente está en el juzgado civil 3, a cargo de Raúl Bassi, quien mediante un edicto publicado en la última edición del Boletín Oficial citó a herederos y acreedores de Tetu. Es por un departamento que el ex interventor tenía en esta capital, donde habría residido un tiempo. En 1999, un grupo de estudiantes realizó un escrache en el inmueble.

En numerosas páginas de internet de organismos de derechos humanos se recuerda que Remus Tetu «era de ideología nacionalsocialista, según sus propias declaraciones. Había pertenecido al gobierno colaboracionista nazi de Rumania y decía haber pertenecido a un grupo similar a los 'ustachis' croatas en Rumania».

Fue interventor de la Universidad Nacional del Comahue y de la Universidad Nacional del Sur, en Bahía Blanca, desde 17 de enero de 1974 hasta octubre 1975, durante la gestión de Oscar Ivanisevich en el ministerio de Educación.

Recuerdan los organismos de derechos humanos que «en este oscuro período fueron cesanteados decenas de profesores y trabajadores no docentes y fue asesinado, dentro de la UNS, el estudiante David Nolver Cilleruelo («Watu») el 3 de abril de 1975, quien se encontraba repartiendo volantes». Era oriundo de Roca.

La actual decana de la facultad de Economía de la UNC, Graciela Landriscini, era ayudante de cátedra en la UNS cuando Tetu fue designado interventor. «Me tuve que ir, igual que otros compañeros», recordó ayer, consultada por «Río Negro». Añadió que «fuimos muchos los que emprendimos una 'retirada patagónica'. En mi caso me fui a Viedma y recién pude volver a la Universidad 20 años después».

Landriscini se enteró de la muerte de Tetu ayer, al dialogar con este diario. Como reflexión, expresó su deseo de que «se terminen el autoritarismo y la persecución, y que haya libertad de expresión».


Adherido a los criterios de
Journalism Trust Initiative
<span>Adherido a los criterios de <br><strong>Journalism Trust Initiative</strong></span>

Nuestras directrices editoriales

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios