El día que la Nasa eligió una imagen de un astrofotógrafo barilochense
Una composición de Martín Moliné fue publicada en la página "Astronomic picture of the day": estrellas fugaces y satélites en el cielo sobre el río Limay.
El barilochense Martín Moliné recibió la mejor noticia que un fotógrafo astronómico pueda recibir: su imagen sería publicada en la página de la Nasa, como «Astronomic picture of the day» (Apod) o Imagen astronómica del día. Nada menos que la principal vidriera astrofotográfica en el mundo.
«Es como un sueño aparecer ahí. Esa página se edita en Michigan, Estados Unidos, y acaba de cumplir 30 años. Todos los días eligen una foto de todo el mundo de acuerdo a tres parámetros: el valor educativo, científico y artístico«, resaltó Moliné.
Los primeros días de mayo este biólogo de profesión tomó una fotografía del río Limay, justo en el mirador conocido como Dedo de Dios en Valle Encantado. Fue durante una madrugada. «Vi que la gente subía fotos desde ahí y planifiqué esa foto el año pasado para esperar la lluvia de estrellas. Sabía que la noche pico de estrellas, el 6 de mayo, estaría nublado, por lo que decidí ir dos días antes«, comentó.
La lluvia de meteoros Eta Acuáridas es visible en la primera mitad de mayo y suele alcanzar su máximo esplendor en la noche del 5 al 6. Ocurre cuando la Tierra atraviesa los restos dejados por el cometa Halley, partículas de polvo y escombros que, entran en la atmósfera terrestre a gran velocidad, creando destellos luminosos conocidos como «estrellas fugaces».
El objetivo de Moliné era retratar la Vía Láctea y la lluvia de estrellas: «Pasó que solo hubo dos estrellas fugaces capturadas por la cámara, pero el cielo se llenó de satélites y pasaron los Starlinks lo que dio lugar a esta composición con tanta información de ese cielo«.
La composición de ese cielo sumó el río Limay: «Es la suerte de tener un muy buen cielo. Fue una foto larga. Pasé toda la noche en el lugar».
Esa imagen fue tomada en principio por una página llamada Ski. Dos días después, era evaluada por los editores de Apod de la Nasa. «Me escribieron para ponerme en aviso que estaba siendo considerada y no supe nada más. Al tiempo, me mandaron el texto que acompañaría la foto, escrito por un astrónomo profesional para que revise si estaba de acuerdo con lo que decía», contó.
El armado de una composición
Moliné explicó que para la astrofotografía se emplean Star Trackers, unos soportes que permiten obtener imágenes de larga exposición en el cielo. El suyo lo compró a Gerardo Ferrarino, un astrofotógrafo de Las Grutas que, con el mismo equipo, ganó dos veces el Apod.
«Es como un motor que contragira la Tierra. Eso permite hacer fotos de larga exposición, compensando la rotación de la Tierra para que aparezcan todos los elementos que uno ve y sobre todo los que no ve. En la foto que fe publicada, hubo dos horas de exposición de cielo», describió. Dijo que al terminar la fotografía, «uno detiene la tracker para que el suelo quede fijo, es decir, la parte de abajo quede frizada».

Astrofotografía como un hobby
Moliné comenzó a abocarse a la astrofotografía a modo de hobby, de la mano del doctor en Física y astrónomo Guillermo Abramson. Su primera imagen correspondió al cometa McNaught que fue publicada en 2006 en Astronomy.
«Volví a la fotografía dos años atrás. Me contacté con el grupo de aficionados a la astronomía de Bariloche que comparten fotos e información de cómo las toman. Con eso y los consejos de Ferrarino fui aprendiendo. Vas haciendo pruebas: por cada foto que comparto, hay 30 que no me gustaron», reconoció.
Semanas atrás, una de sus fotografías recibió el segundo premio en el concurso del Instituto de Astrofísica de La Plata, por la celebración de sus 25 años. “Historias de óxido e infinito” fue tomada en el cerro La Buitrera a las 23 horas. “La obra presenta el centro de la Vía Láctea apareciendo sobre La Buitrera. Abajo, restos de una camioneta oxidada contrastan tiempos y tamaños humanos con la inmensidad de nuestra galaxia”, puntualizó el autor barilochense en esa ocasión.

En relación a la astrofotografía, aseguró: «Me permite relajar, conectar con el cielo. Sin dudas, este reconocimiento a uno lo llena de orgullo porque es la página más importante de astrofotografía en la que uno pueda aparecer».
Sobre el contexto de la imagen seleccionada, destacó la experiencia de estar solo en un lugar único y en medio de la noche. Subió el 4 de mayo a las 12 de la noche para preparar el equipamiento y calibrarlo y, permaneció hasta cerca de las 6. Aseguró haber escuchado a dos pumas pelearse a muy pocos metros.
«Había subido el día anterior para ver a dónde iba a colocar la cámara. Pretendía ver la lluvia de estrellas Eta Acuáridas. Cada año se ve mejor o peor, de acuerdo a cuánta Luna haya. El pico es el 6 de mayo, pero como estaría nublado fui dos días antes. Fui compensado con lo que me encontré porque siempre hay sorpresas que no estaban planificadas«, mencionó.

Comentarios