No hay colectivos de Koko en Neuquén y Río Negro: «Sin subsidios, el transporte se volvió inviable», dijo la empresa

La empresa Koko suspendió sorpresivamente sus servicios interurbanos y afectó a cientos de usuarios en Neuquén y Río Negro. Por decisión del empresariado, la medida fue tomada tras las dificultades económicas agravadas por la quita de subsidios.

Usuarios de la región se vieron sorprendidos hoy al descubrir que la empresa de transporte interurbano Koko suspendió sus servicios. Aunque se había anunciado una medida de fuerza para la próxima semana, la paralización ocurrió antes y no es una decisión sindical. Nicolás Herrera, representante de la firma, aclaró en RÍO NEGRO RADIO que la interrupción se relaciona con la imposibilidad de la empresa de afrontar los costos del servicio, especialmente tras la quita de subsidios por parte del gobierno nacional.

Este viernes marcó el inicio de mes con una situación inesperada para los usuarios del transporte interurbano en la región, ya que la empresa Koko suspendió sus servicios.

Escuchá al contador y representante de Koko, Nicolás Herrera en RÍO NEGRO RADIO:

Aunque se había anunciado una medida de fuerza por parte del gremio UTA para el próximo martes, la paralización ocurrió de manera sorpresiva, dejando a miles de usuarios sin la posibilidad de trasladarse entre Río Negro y Neuquén.


Crisis en el transporte público de Neuquén y Río Negro: usuarios se quedaron sin colectivos de Koko, este viernes


La situación que enfrenta el transporte público en la región se torna cada vez más crítica, siendo un reflejo de la realidad que atraviesa el sector a nivel nacional. Herrera destacó la complejidad del escenario, donde diversos factores convergen para generar un contexto desfavorable. Entre ellos, señaló el aumento exponencial de costos, especialmente en lo que respecta a combustibles y salarios del personal.

«Entre combustible y mano de obra, tienen el 50% del costo ahí. Sumado a la suba general de precios, el transporte se está volviendo inviable«. Herrera añadió que la quita de subsidios por parte del gobierno nacional ha afectado significativamente a la empresa.

Uno de los puntos centrales en el conflicto es la negociación entre la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (FATAP), la cámara que agrupa a las empresas de transporte en el interior del país. Herrera enfatizó en la falta de acuerdo entre ambas partes, con la UTA buscando igualar las condiciones salariales establecidas para las líneas del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) hace unas semanas.

El representante de Koko detalló los incrementos salariales propuestos por la UTA, que incluyen porcentajes considerables y cuotas extraordinarias .«No salir con los colectivos es una forma de visibilizar la realidad. Es lo que estamos viviendo en el transporte en todo el país», afirmó.

Sin embargo, señaló que, dadas las condiciones económicas actuales y el aumento significativo de los costos operativos, la empresa no puede comprometerse a cumplir con tales demandas salariales.

Herrera puso énfasis en la crítica situación financiera que enfrentan las empresas de transporte, con cerca del 50% de los costos destinados a combustibles y mano de obra. El reciente incremento del precio del combustible, sumado a la inflación general, llevó al transporte a una «situación económicamente inviable». Además, aseguró que los subsidios son cada vez menores, mientras que las tarifas no se actualizan de acuerdo con la inflación, generando un desequilibrio económico insostenible.

El entrevistado también hizo referencia al diálogo constante con el Gobierno de Río Negro, destacando la buena voluntad para encontrar soluciones. Sin embargo, subrayó la difícil realidad económica que afecta a todas las jurisdicciones, exacerbada por la decisión del Gobierno Nacional de reducir los subsidios al transporte.

Ante este escenario, Herrera planteó la necesidad de sincerar los precios del servicio de transporte. Propuso una tarifa técnica que refleje los costos reales, reconociendo que el Estado, ya sea a través de subsidios o tarifas actualizadas, debe garantizar la viabilidad económica del transporte público.

En cuanto a la suspensión del servicio, Herrera reconoció que es una medida «desagradable», pero destacó que «la empresa debe priorizar su viabilidad económica y cumplir con sus compromisos«. También mencionó la posibilidad de reuniones con las autoridades para buscar soluciones y evitar un perjuicio prolongado a los usuarios.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios