“Su único problema era con su ex pareja”

El geriátrico Los Alelíes, donde trabajaba la joven.

NEUQUÉN (AN)- Miriam Flores “no tenía ningún inconveniente ni temor a nada”. El “único problema que manifestó siempre era con su ex pareja, Salvador Pucci”, aunque “nunca me dijo que hubiera sufrido algún hecho violento”. Así lo relató ayer Mirta, la dueña del geriátrico Los Alelíes, donde la joven paraguaya trabajaba desde hacía más de dos años. El hogar está en Santa Cruz y Copahue de esta capital. Mirta dijo que ella había decidido cortar la relación “por la diferencia de edad: él le llevaba 30 años, tiene más de 55”. Añadió que “los vecinos la vieron discutir con él, las demás empleadas sabían que él la perseguía, la acosaba”. La relación era tan mala que en las semanas previas a su desaparición “ella se estaba quedando a dormir en el hogar, no quería ir al departamento pero no me decía que este hombre estaba instalado allí”. La última vez que se la vio, el 5 de mayo, Miriam salió del hogar rumbo a su departamento para alimentar a la gata, y después tenía pensado pagar una factura telefónica. En diálogo con LU5, la dueña del geriátrico recordó que “almorzó conmigo, tomamos mates, y salió”. Una hora y media después alguien le avisó que la moto de Miriam estaba frente a la puerta del hogar aunque en la calle y no sobre la vereda como la dejaba siempre. También estaban tiradas las llaves. Respecto del departamento, Mirta explicó que “hacía pocos meses que habíamos logrado hacerle un contrato. Ella me dijo que quería vivir sola para estar tranquila”. Pero con el tiempo, Miriam pasaba cada vez más tiempo en el hogar. La dueña del geriátrico se enteró que se debía a que su ex pareja se había instalado en el departamento. Mirta indicó que se encontró con Pucci el 20 de mayo, cuando fue a vaciar el departamento para entregarlo a su propietario porque no podía seguir pagando el alquiler. “Él me dijo que no sabía nada, que hacía 4 días que no tenía contacto. Ella no le quería atender el teléfono, le dijo que lo había perdido para que no la llamara”. Fue imposible establecer si el hombre figura entre los sospechosos. Las fuentes a las que pudo acceder “Río Negro” evitaron mencionarlo. En general el hermetismo es la tónica que cubre los detalles más sensibles de la investigación.

Yamil Regules