Susana Mujica: joven neuquina secuestrada y desaparecida por la última dictadura militar

En una fecha tan triste para la historia argentina en donde un golpe de Estado tomó el poder por la fuerza y construyó sus bases a través del miedo y la muerte, no queda menos que homenajear a jóvenes que lucharon por ideales de un mundo mejor y les arrebataron la vida. Mi compañera de escuela, Susana Mujica, fue una de ellas.

Era hija de Miguel Mujica, odontólogo nacido en General Villegas (localidad de la provincia de Buenos Aires) el 11 de septiembre de 1917, hijo de Toribio Mujica –apellido que originariamente se escribía Muxika, de origen vasco– y de Josefa Aramberri. Su papá también tuvo una historia de militancia en su juventud: cuando terminó el secundario partió a Córdoba a estudiar Odontología y fue militante en las filas de Amadeo Sabattini, aquel emblemático gobernador cordobés y radical.

Una vez recibido, Miguel fue a trabajar a Villa María, localidad en la provincia de Córdoba, donde conoció a Josefa Lepori (Beba), con quien se casó en la década del 40; poco después, la pareja arribó al territorio neuquino, a Cutral Co, en donde residían algunos de sus amigos.
Tuvieron dos hijas neuquinas, Irene y Susana, y en esa ciudad abrió su consultorio. Fueron vecinos de los Sapag, quienes también fueron sus pacientes. Don Miguel Mujica fue Convencional de la Honorable Convención Constituyente de 1957, quienes tuvieron a cargo la sanción de la Constitución Provincial, perteneció al Bloque de la UCRI. A fines de la década del 50 se trasladaron a Neuquén capital, Miguel abrió el consultorio en la segunda cuadra de la calle Santa Fe. Irene, la hija mayor, actualmente integra la Cooperativa Surgente en donde trabajan con organizaciones de productores del campo y coordina la cátedra libre de Soberanía Alimentaria en San Martín de los Andes.

Susana había nacido en Zapala el 15 de diciembre de 1948 y realizó la escuela primaria en Cutral Co para terminarla en la antigua Escuela Nº 2 de Avda. Argentina esquina Carlos H. Rodríguez. Fue secuestrada y desaparecida el 9 de junio de 1976. Había ido a Buenos Aires a estudiar a la Universidad de El Salvador, Ciencias Políticas y militó en el PRT (Partido Revolucionario de los Trabajadores), cuyo brazo armado era el ERP. En Neuquén se desempeñaba como docente en la carrera de Servicio Social de la Universidad del Comahue y vivía en calle Sargento Cabral esquina Yrigoyen cuando fue secuestrada. Acababa de parir a uno de sus dos hijos.

Ellos, Matilde Altomaro Mújica y Martín Altomaro Mújica, residen en México, partieron desde muy niños a esa ciudad con su padre, para nunca regresar a vivir a Argentina. Beba, mamá de Susana, integró el primer grupo de Madres de Plaza de Mayo, luchando por la recuperación con vida de sus hijos. Hoy, Susana, te brindamos este homenaje. ¡Cómo olvidar las exhibiciones de gimnasia que hacíamos a fines de los 60 en la cancha del Club Pacífico pertenecientes a la Escuela San Martín: marchábamos derechitas, con nuestras polleritas blancas bajo la atenta mirada de las profesoras Negrita y Gringa Torres Delfino, sin una pizca de pintura en la cara! Podemos apreciarlo en la fotografía que acompaña este escrito, vos en la fila central, la de la derecha con el cabello atado. Amiga, desde donde estés, nuestro profundo recuerdo del Neuquén del ayer… Que tu ausencia, tu secuestro y desaparición sirva para que nunca más vuelvan a ocurrir hechos de esta naturaleza.

Beatriz Carolina Chávez
DNI 6.251.256