Tres policías y un ex municipal a juicio por filtrar datos a un comerciante trucho

Un ex empleado municipal en complicidad con tres policías, adelantaban los allanamientos a un comerciante que vendía bebidas alcohólicas de forma clandestina en un comercio ubicado en Belgrano al 2300.

Más de 30 testigos, incluyendo los jueces de los tribunales de Faltas de la ciudad Gabriela Del Campo y Federico Hauck, serán parte de la prueba en el juicio que se llevará a cabo por las filtraciones en el Juzgado de Faltas.

Un ex empleado municipal en complicidad con policías provinciales, le adelantaban los allanamientos a un comerciante que vendía ilegalmente alcohol. Los hechos ocurrieron en marzo de este año por el accionar de un negocio ubicado en Belgrano al 2.300.

La causa se elevó a juicio, según confirmó el apoderado de la comuna, Javier Pino, que será el querellante en el juicio en el que están imputados tres policías y un ex municipal acusados de violación de secreto e incumplimiento de deberes de funcionario público.

“El juez Mauricio Zabala nos notificó que la causa se elevó a juicio y próximamente sabremos la fecha”; dijo el abogado quien destacó que “el municipio es querellante porque así lo definió el intendente Horacio Quiroga que quiere llegar con una respuesta a los vecinos que se preocupan por la transparencia de los actos públicos”.

Agregó que el empleado fue despedido de la comuna en cuanto se conoció su rol en la cadena de complicidades que le permitían al comerciante salir airoso de los procedimientos policiales en busca de alcohol.

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Según describió Pino, luego de cuatro o cinco allanamientos fallidos ordenados por a jueza Del Campo al mismo negocio que era denunciado por los vecinos como un lugar de provisión de alcohol a menores, comenzó la investigación para dar con la “filtración” del dato.

Detalló que el área de delitos económicos, allanó inclusive el juzgado de Faltas, con la requisa de celulares y documentación.

De las medidas surgió que el municipal le enviaba mensajes de whatsapp a tres efectivos de la comisaría tercera, quienes a su vez alertaban al comerciante de la inminente llegada del operativo.

“Todo se originó de la denuncia de los mismos vecinos, que reclamaban a la municipalidad la intervención ante un comerciante que vendía alcohol en forma ilegal, con gran provisión a menores que tomaban y se emborrachaban en las inmediaciones al lugar; lo que formaba parte del intenso malestar en el barrio. Los acusados son el comerciante Hugo Alberto Rojas, Héctor Asnal es el empleado que fue despedido cuando se conoció de esta participación, y los policías imputados son Campos, Vergar y Trujillo, de la comisaría tercera”, destacó.


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