El caso de la zona liberada que nunca se investigó a fondo

El viernes 11 de mayo de 2012 el policía Jesús Alberto Aleman recibió un disparo cuando intentaba impedir el robo a una aseguradora en Gallardo 427.

Jesús Alberto Aleman se retiró recientemente de la Policía de Río Negro tras 25 años y 11 meses de servicio. Todavía tiene presente el momento donde su vida corrió peligro. “Era un viernes once de mayo de 2012, a las dos de la tarde, cuando ocurrió ese hecho. Y a las catorce y diez casi muero”, rememoró Aleman, que recibió un disparo de arma de fuego cuando intentaba impedir un robo en una aseguradora de la calle Gallardo 427 de Bariloche.

Esa tarde, tres sujetos entraron al local, donde el sargento Aleman se encontraba. Uno de los delincuentes gritó: “¡Esto es un asalto!”. Aleman intervino: “¡Alto policía!”, advirtió mientras apuntaba con su pistola reglamentaria a los asaltantes. Aleman pensó que sus compañeros que estaban en el exterior iban a llegar en apoyo. Pero nadie fue en su auxilio.

Aleman recibió un disparo que le causó lesiones graves. Salió, herido, a la calle a pedir ayuda y terminó internado.

Por la gravedad de la lesión se sometió a tres cirugías, además de la rehabilitación y el prologado tratamiento psicológico. Aleman denunció que lo dejaron solo. Que esa tarde hubo supuestamente una zona liberada.

Investigar

Cuando los jueces de la Cámara Criminal Primera escucharon a principios de marzo de 2013 su declaración en el juicio contra Sergio Daniel Castillo y Claudio Enrique Pacheco, que fueron condenados por el robo y las graves lesiones sufridas por el sargento, ordenaron librar oficio a la Unidad Fiscal de Atención Primaria -UFAP- para que se investigue minuciosamente la denuncia de Aleman.

El entonces fiscal de Cámara Carlos López advirtió en los alegatos del juicio que hubo “una zona liberada”. López señaló que a Aleman lo dejaron solo para enfrentarse a un ilícito que la comunidad policial sabía de antemano se iba a producir.

“Concuerdo con las manifestaciones del Dr. López. Escapa al entendimiento que avisados los efectivos policiales sobre la producción del hecho delictivo, sabiendo el lugar, día y posiblemente hora del atraco y pudiendo anticiparse y realizar el despliegue idóneo para su efectiva prevención, el sargento Aleman debiera afrontar solo la defensa de la aseguradora asaltada”, advirtieron los jueces en la sentencia.

“Si además las constancias indican que vía radial se adelantó la presencia de Pacheco en las inmediaciones momentos previos, no se alcanza a comprender porqué el argento Aleman no tuvo pleno acompañamiento de sus pares”, señalaron en la sentencia, que se dictó el 11 de marzo de 2013.

La causa murió

Pasaron cuatro años y la investigación nunca avanzó para esclarecer el hecho denunciado. El fiscal Guillermo Lista recién promovió la acción penal el 30 de abril de 2014. Lista imputó a Doctors y los empleados policiales Juan Pablo Siris, Carlos Ferrada, Juan Carlos Laurín, Walter Huenul y Adrián Fabio Valdebenito por el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público. Se trata de un delito que el Código Penal reprime con prisión de un mes a dos años e inhabilitación especial por doble tiempo al funcionario público.

El entonces abogado de la Policía de Río Negro, Mario Altuna, que después fue designado por el gobernador Alberto Weretilneck como jefe de la Policía provincial, defendió a los policías imputados y no asistió a Aleman, que era la víctima y denunciante del caso.

Así, Aleman se encontró sin apoyo, excepto el de su familia y de algunos compañeros de la Policía. Tuvo que recurrir al abogado particular Sebastián Arrondo para constituirse como querellante. Recién en ese momento la causa se activó, porque Arrondo pidió las indagatorias de los imputados. El juez de Instrucción Ricardo Calcagno citó a indagatoria a Doctors, Siris, Ferrada, Laurín, Huenul y Valdebenito, que comparecieron a mediados de septiembre de 2015. Los imputados negaron el hecho que la acusación fiscal les atribuyó.

Altuna pidió el sobreseimiento de los imputados porque planteó que la causa había prescripto.

Calcagno le dio la razón a Altuna y sobreseyó el 20 de noviembre de 2015 a los policías. Aleman apeló. Advirtió que no correspondía la prescripción.

Arrondo recordó que planteó en la apelación que, según el artículo 67 del Código Penal, “la prescripción también se suspende en los casos de delitos cometidos en el ejercicio de la función pública, para todos los que hubiesen participado, mientras cualquiera de ellos se encuentre desempeñando un cargo público”. Señaló que los imputados seguían siendo empleados policiales.

En la apelación solicitaron revocar el sobreseimiento.

Arrondo rememoró que el fiscal de Cámara Martín Lozada dictaminó a favor de hacer lugar a la apelación, pero los jueces de la Cámara Criminal Segunda desestimaron el recurso el 7 de marzo del año pasado y confirmaron el sobreseimiento de los policías.

El abogado por la querella sostuvo que interpuso un recurso de casación para tratar de llegar al STJ para que revise el fallo, pero la Cámara Criminal Segunda lo rechazó el 5 de mayo de 2016. Dijo que Lozada no los acompañó en esa instancia. Al quedarse solos, sin respaldo de la fiscalía, optaron por no promover un recurso de queja como para llegar al STJ.

Allí, la causa murió.

Según la acusación fiscal, la Brigada de Investigaciones de la comisaría Segunda tenía información sobre un posible asalto en la aseguradora.

Aleman debía estar en el interior y el comisario y cinco efectivos afuera. El sargento denunció que nadie lo ayudó y que su chaleco antibalas estaba vencido.

El hecho

Según la acusación fiscal, el comisario Luis Doctors había convocado la noche del 10 de mayo de 2012 a una reunión porque tenían información de un posible asalto en una aseguradora. Doctors estaba a cargo de la Brigada de Investigaciones de la comisaría Segunda.

Doctors distribuyó las funciones. El sargento Jesús Aleman tenía que estar en el interior de la aseguradora y recibió un chaleco antibalas y un handy. El comisario y cinco policías estarían en las inmediaciones. Los delincuentes perpetraron el asalto e hirieron gravemente a Aleman, que denunció que el chaleco antibalas que le dieron estaba vencido desde 2001 y el handy no funcionaba.

Datos

Según la acusación fiscal, la Brigada de Investigaciones de la comisaría Segunda tenía información sobre un posible asalto en la aseguradora.
Aleman debía estar en el interior y el comisario y cinco efectivos afuera. El sargento denunció que nadie lo ayudó y que su chaleco antibalas estaba vencido.

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