El dramático caso del bebé golpeado casi hasta matarlo

La intervención de una pediatra en el hospital zonal fue decisiva para resguardar a la criatura, ya que los mayores habían dicho que fue por caerse de la cama.

La noticia de un bebé golpeado brutalmente estremeció la mañana del 29 de diciembre último a la población de Bariloche y causó profunda indignación. La vida del pequeño estaba en riesgo y su pronóstico era reservado, informaron entonces desde el hospital Ramón Carrillo.

Mientras el bebé de 16 meses luchaba por su vida, tras haber sido sometido a una cirugía para evacuar un hematoma subdural que presentaba en su cráneo, la madre y el padrastro estaban detenidos a disposición de la fiscal y juez de turno.

Las sospechas apuntaban hacia la pareja. Con el transcurso de las horas y el avance de la investigación, la fiscal Betiana Cendón señaló a Maximiliano Merlo como el presunto autor de la golpiza y lo acusó por el delito de intento de homicidio.

La madre del bebé no fue imputada y recuperó la libertad. Es más, la imputación contra Merlo se hizo a partir de la declaración de la joven que describió con detalle el maltrato que sufrió su hijo a manos de quien era su pareja.

Gran parte de la ciudadanía siguió con atención la evolución del estado de salud del pequeño, que se recuperó en pocos días y dejó a principios de enero pasado la terapia intensiva pediátrica. Después, estuvo en la sala de internación de pediatría y el 11 de enero recibió el alta médica.

Tres meses después, “el bebé está recuperado”, aseguró una fuente judicial que conoce el expediente.

Explicó que el pequeño sigue con el tratamiento indicado por los especialistas, pero está evolucionando favorablemente. Aunque la fuente aclaró que las secuelas que dejaron las lesiones recién se podrán determinar con precisión con el paso del tiempo.

“Se cayó de la cama”

Merlo entró a la guardia del hospital local con el bebé inconsciente. Era la madrugada del 29 de diciembre. El sujeto explicó que el pequeño se había caído de la cama a la médica que atendió la urgencia. Pero la pediatra observó que el bebé no presentaba ninguna lesión en la cabeza como consecuencia de la caída. Por el contrario, tenía múltiples hematomas en las rodillas, en la cara, en el tronco. Los golpes, a simple vista, eran de hace varios días.

La médica entrevistó a Merlo y a la madre del bebé, que llegó después descalza a la guardia. Los dos relataron que el bebé se había caído de la cama. Cuando la médica le preguntó a la mamá por todos los hematomas que tenía el pequeño, la joven respondió que el bebé se pegaba siempre con un portón que había en el domicilio donde vivían.

Las explicaciones no convencieron a la pediatra que activó el procedimiento para tratar los casos de presunto maltrato. El bebé fue sometido a una cirugía para evacuar el hematoma subdural que presentaba. Estuvo algunos días en terapia pediátrica y sobrevivió.

El informe del cuerpo médico forense concluyó que la vida del bebé de 16 meses estuvo en peligro “de manera real y efectiva”.

La madre del bebé después cambió su versión. Alegó que no relató lo que había ocurrido con su hijo porque estaba atemorizada por su pareja que también la maltrataba a ella.

Merlo fue enviado a finales de diciembre último al penal 3 mientras la investigación avanzaba. La fiscalía recolectó pruebas que incriminaron al joven de 21 años, y a mediados de febrero pasado, la Cámara Criminal Segunda rechazó el recurso de apelación de la defensa de Merlo y confirmó el procesamiento y la prisión preventiva contra el imputado. Calcagno cerró la etapa de instrucción el 23 de marzo y elevó la causa a juicio, tras el pedido de la fiscalía. Merlo llegará detenido al juicio.

La madre del pequeño llevaba apenas un mes conviviendo con el acusado cuando este comenzó a ser agresivo con el niño.

La víctima tuvo que ser sometida a cirugía por causa de un hematoma subdural. Estuvo en terapia y fue dada de alta en enero del 2017.

Datos

La madre del pequeño llevaba apenas un mes conviviendo con el acusado cuando este comenzó a ser agresivo con el niño.
La víctima tuvo que ser sometida a cirugía por causa de un hematoma subdural. Estuvo en terapia y fue dada de alta en enero del 2017.

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