“Hipocresía”

Es una hipocresía que Cristina Fernández hable de inflación y corrupción cuando ella tiene procesos en curso plagados de pruebas y por los que algún día tendrá que responder si la Justicia se decide a actuar. Es una hipocresía que hable de unión cuando ella se dedicó a dividir, agredir, descalificar y perseguir a todo el que no aprobaba su atropello y autoritarismo.

Es una hipocresía que hable de pobres cuando ella se fue dejando la mayoría de los que hoy existen, mientras que su patrimonio fue creciendo con la complicidad de Báez, Cristóbal López y De Vido, entre otros.

En una ocasión, encontrándose en un barrio, presencié cómo un grupo identificado como camporista advertía a la gente que toda vez que se convocara a un acto de Cristina debían asistir, ya que de no hacerlo les serían retirados los planes de miseria con los que podían mantener el voto cautivo. Eso es extorsión.

En la reciente reunión que tuvo con intendentes, con la sola presencia de sus violentos de siempre, se escuchó claramente una voz que le dijo: “Devolvé la plata”, y al toque salieron sus dominados tratando de agredirlo físicamente, insultándolo con expresiones irreproducibles. Así son los actos de la señora Cristina, que cree ser superior a todos, de otra elite, basando su campaña en la descalificación, el odio y faltando a la verdad.

Lo mismo ha sucedido en las movilizaciones de los docentes, la marcha de las mujeres y actos oficiales, en los que también se han detectado infiltrados kirchneristas con el solo objetivo de generar violencia y caos.

Ha minimizado opacando a algunos de los que fueron parte de su gobierno calificándolos despectivamente de “empleados”, y diciendo que dada esa condición “no puede ni debe competir ni discutir con ellos”, olvidando que ella también fue empleada de quienes le dieron el voto, muchos de los cuales hoy se sienten defraudados por la corrupción de su gobierno.

Entiendo que ser presidente o presidenta no significa que el cargo lo faculte para atropellar y someter a propios y extraños ni apropiarse del Estado. Es sólo un mandatario, al que sí se le debe guardar el respeto que merece su investidura, y al que se encomienda la tarea de gestionar honestamente al beneficio del país y su gente.

En mi opinión, la meta buscada es acceder al Congreso y guarecerse en los fueros eludiendo así la acción de la Justicia, como lo hicieron y lo siguen haciendo Menem, De Vido y Scioli, tomando el Congreso como aguantadero.

Jorge Temi

DNI 7.567.867

Jorge Temi

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