Allense gestionó la ciudadanía italiana y lo estafaron

La ilusión de viajar al pueblo donde nació su padre, Ascoli Piceno, Italia, se desmoronó cuando supo que había sido víctima de una estafa que jamás imaginó. El ardid lo descubrió cuando llamó al Consulado Italiano de Bahía Blanca donde le informaron que tenía su ciudadanía, y la de su familia, pero que no podían entregársela porque no había sido cancelado el pago. En ese momento, Eduardo Vannicola (55) no podía creer lo que estaba escuchando.

“¿Cómo puede ser que no figure el pago si yo le pagué 12 mil pesos a través de mi tarjeta de crédito al vicecónsul de la delegación Cipolletti para que me haga el trámite?”, le preguntó asombrado al cónsul general, en una comunicación telefónica.

La denuncia la radicó el 19 de julio en el juzgado Federal de Roca por defraudación y estafa. La hizo en contra de quién era el vicecónsul de la delegación de Cipolletti, en Sáenz Peña 280.

Vannicola relató a “Río Negro” que en mayo de 2015 se acercó a la asociación para tramitar la ciudadanía Italiana, la de sus dos hijos, la de su esposa y la de su nieta y que lo atendió quien estaba a cargo de la delegación de esta ciudad. “Este hombre, en realidad este delincuente, fue muy amable, me trató muy bien. Me dijo que podía pagar en euros, dólares o con tarjeta de crédito. Me cobró 11.800 pesos en tres cuotas y me dijo que en 2017 llamara al Consulado general que está en Bahía Blanca para pedir la documentación”, contó Vannicola.

Cuando llamó , se encontró con que su pago nunca había sido registrado por la institución y descubrió que quien lo había atendido tan amablemente, lo había estafado. “Lo peor de todo es que ahora me exigen que vuelva a pagar el trámite para darme las ciudadanías. El Consulado no se hizo cargo de nada y por eso radiqué la denuncia. Es una locura que me pidan que pague un trámite que ya aboné y que no se hagan cargo de quien era su empleado”, reclamó.

Entonces supo que habían desvinculado de la organización al vicecónsul de la sede de Cipolletti por mal desempeño de sus funciones. Vannicola intentó solucionar la situación por mail y teléfono pidiéndole al cónsul general, Antonio Petrorulo, en Bahía Blanca, la entrega de su documentación. Pero nada de eso ocurrió. La respuesta fue que no podían responsabilizarse por las acciones de un exempelado.

No fue la única víctima. “Después que radiqué la denuncia otras dos personas hicieron otras y me dicen que hay otros tres damnificados que van a hacerla”, indicó.

Varios casos