Absolvieron en Bariloche a un joven acusado por abuso de armas

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- La Cámara Segunda del Crimen absolvió por falta de pruebas suficientes a un joven con antecedentes penales que llegó a juicio acusado por portación y abuso de armas. Si bien algunos testigos sindicaron a Sebastián Fernández como quien disparó contra una vivienda, a la vez que profería amenazas, hubo contradicciones entre ellos y nadie pudo asegurar que estuviera en el lugar y que haya sido quien efectuara los disparos.

«Ante este cuadro jamás podríamos fundar la asignación de autoría y condena, recurriendo al relato de la denunciante que nos llega por el registro del acta de instrucción, a la que por diversos motivos no puede otorgársele valor convictito dirimente», argumentó el juez César Lanfranchi.

El fiscal le atribuyó a Fernández el hecho ocurrido el 10 de diciembre de 2006, frente a una casa situada en Pablo Mange y Beschtedt, ocasión en que habría efectuado contra el frente del domicilio 6 disparos con un arma calibre 22, en tanto que dos individuos lo acompañaban y gritaban «salgan miliqueros de mierda que me mandaron a la alcaidía».

Al alegar, el fiscal de Cámara Enrique Sánchez Gavier consideró que el ataque de Fernández estaba motivado por el antecedente citado, ya que lo condenaron a un año de prisión por balear en un brazo a un joven de apellido Giordano, nieto de la dueña de casa, y también mencionó otro antecedente para definir la personalidad del acusado, referido a un robo con armas que quedó en grado de tentativa, hecho por el que fue condenado a tres años y ocho meses de prisión, que cumplió parcialmente.

El fiscal consideró acreditado que el acusado portaba un arma y efectuó disparos contra una vivienda, y al pedir la pena por la portación de arma y la agresión y daño a la vivienda, se alejó del mínimo y pidió un año y medio de prisión, porque el acusado ya fue condenado otras dos veces por delitos con armas.

Fernández negó los hechos que le atribuían e insistió en que cuando se produjo la agresión no estaba en la ciudad, pero al concluir la audiencia le pidió al tribunal que le dé otra oportunidad para recuperar su libertad y dedicarse a trabajar.